De Vido y Dromi salpicados por el “Petrolao”

Uno de los principales arrepentidos los acusó de estar involucrados en el pago de sobornos por la venta de la empresa Transener.

Julio-De-VidoEl escándalo de corrupción que sacude a Petrobras en Brasil salpica ahora a los ex ministros de Planificación Julio de Vido y Roberto Dromi, ya que uno de los principales arrepentidos los acusó del pago de sobornos por la venta de la empresa de transmisión de energía Transener.
El ex director del área internacional de la compañía, Néstor Cerveró, confirmó que en 2006 recibió una coima de 300 mil dólares por la venta de Transener -adquirida por Petrobras en la compra de Pérez Companc en 2002-, e involucró en el negocio a los ex ministros argentinos.
“En ese negocio, la mayor parte de las coimas quedó en la Argentina”, aseguró Cerveró ante la Procuraduría General de la República, según informa el diario La Nación.
Cerveró, condenado a 17 años de prisión por su participación en el “Petrolao”, acordó el año pasado con la Justicia revelar más datos sobre el complejo entramado que envuelve a ex directivos de la compañía estatal, empresarios de las principales constructoras de Brasil y políticos de la coalición oficialista comandada por el Partido de los Trabajadores (PT) de la presidenta Dilma Rousseff.
El ex directivo ya había indicado que cuando Petrobras compró Pérez Companc se pagaron unos 100 millones de dólares en sobornos a funcionarios del entonces gobierno de Fernando Henrique Cardoso, del actual opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que lo negó rotundamente, y a ejecutivos argentinos, entre quienes mencionó al entonces titular de la petrolera argentina, Oscar Vicente, y lo acusó de cobrar 6 millones de dólares.
Como parte del negocio, Petrobras se quedó con el 50% de Citelec, que controlaba Transener, pero debido a las leyes de competencia argentinas fue obligada a vender esta empresa.
Según Cerveró, en 2006 Petrobras había llegado a un acuerdo con el fondo de inversión estadounidense Eton Park, pero que por presiones de De Vido acabó vendiéndole Transener a la estatal Enarsa y a Electroingeniería, por unos 54 millones de dólares.
Y dijo que en las reuniones participaron, entre otros, el ex ministro de Obras y Servicios Públicos durante la administración de Carlos Menem, Roberto Dromi, y su hijo, Nicolás.