El titular de Consumidores Libres, Héctor Polino, destacó los números que midieron de lo que señalan como la “canasta de medicamentos”. Se registraron subas desde un 6 hasta un 144% y explicó los matices de esta medición. “No es posible que los laboratorios remarquen los precios de manera abusiva y con finalidades especulativas ya que no responde a ninguna lógica”.
La Agrupación Consumidores Libres emitió un comunicado donde señala el aumento de precios que hubo en los últimos tres meses en lo que ellos denominan como la “canasta de medicamentos”. El titular de la entidad, Héctor Polino, señaló en la 99.9 que “desde hace varios años con la Fundación AMED, llevamos a cabo un relevamiento de 22 artículos de la canastas de medicamentos”. Luego abundó: “de esa cantidad, el promedio de aumento en los últimos tres meses es del 15,76%. Los que menos subieron fueron en un 6,10%, pero el que más subió llegó 144,57%. En tres meses el aumento del 15,76% es muy significativo que debería llamar la atención de las autoridades nacionales”.
La intervención de los organismos de control del estado es fundamental para que esta situación no se dé, pero parecen no estar presentes. “No es posible que los laboratorios remarquen los precios de manera abusiva y con finalidades especulativas ya que no responde a ninguna lógica. El 60% de los medicamentos son de fabricación nacional y el 40% importado, no hay razón para este aumento”, aclaró.
Dentro de los números que informaron, aparece una cifra que impresiona y tiene que ver con un aumento de 144%. La explicación que brindó Polino fue que “hay un caso de aumento encubierto: en diciembre del año pasado la caja de aspirinetas por 98 comprimidos a 47,17 pesos. En los últimos días cambian a cajas de 28 comprimidos con un precio de 33 pesos. Cuando uno saca el cálculo, cada comprimido valía 48 centavos y pasó a valer 1,18 pesos. Hay un aumento de 144%”.
La aclaración fundamental en este análisis es la importancia de los medicamentos para muchas personas: “los medicamentos no son artículos de lujo, no son mercancías sino un bien social y su accesibilidad debe estar garantizada por el estado. No pueden mirar para el costado y dejar que la industria actúe impunemente. Se debería impulsar la fabricación nacional de medicamentos”, finalizó.