Cuál es la estrategia del país para vender carne en China.
Cualquier recurso puede ser la llave que finalmente abra la puerta del mercado chino. Y si no, que lo digan los frigoríficos que exponen la carne argentina en un pabellón de la SIAL, la feria de alimentación más importantes del mundo.
Los productores convocados por el Instituto de Promoción de Carne Vacuna Argentina (Ipcba) no tuvieron pruritos a la hora de cambiar las fotos y restarle protagonismo a la clásica foto del bife y suplantarla por comidas orientales que incluían carne. Más aún, una de las principales fotografías que muestra el concurrido stand es un plato profundo que incluye una preparación de verduras y trozos de carne y los típicos palitos chinos apoyados.
La anécdota ilustra las necesidades de adaptación que deben tener los sectores si lo que quieren es vender en mercados diversificados. La Argentina, explicó Vueguen, está autorizado a vender carne congelada sin hueso a China y, por ahora, ese es el único mercado. Sin embargo, algo puede cambiar. “Estamos muy cerca de poder empezar a vender carne refrigerada, pero la verdad es que no estamos tan entusiasmado por el tipo de mercado”, dice.
Sucede que los supermercados de China no tienen gran oferta de productos cárnico refrigerados. En gran parte de ellos las enormes peceras con especies vivas son las preferidas a la hora de llevar alimento fresco. Luego, para la clase media, que ha mejorado su nivel de consumo, están los productos congelados. No hay demasiados productos frescos. “Además, la cadena de distribución no está demasiada preparada, ya que está orientada a todo lo congelado”, explica Vueguen.
Según datos del Ivcva, China resultó el principal destino, en volumen, de las exportaciones bovinas en enero pasado. Durante el primer mes del año se embarcaron aproximadamente 3003 toneladas, seguido por Israel con 3000 toneladas. Luego se ubicaron Chile (2130 toneladas) y Alemania (1463 toneladas). Sin embargo, en cuanto al valor de dólares ingresados al país, el principal mercado durante el primer mes de 2016 fue Alemania, que representa 24,3% del valor total exportado de carne vacuna enfriada, congelada y procesada, seguido por Israel (23,0% del total), y China (16,8%).
China es un gran comprador de cortes baratos de carne que se utiliza para los platos típicos orientales. Sin embargo, de a poco y de la mano de la nueva clase media, los cortes de calidad empiezan a abrirse camino.
Pese a la seducción a los chinos con carne en medio de chop suey, el stand, en el que participan 24 frigorífico argentinos, no esconde el típico bife. Un televisor emite un paso a paso sobre cómo preparar un corte de carne magra con estilo más criollo. Y hay otra característica más. El estilo argentino queda representado en las mesas que ocupan gran parte del porcentaje del lugar. Cada expositor tiene asignado un lugar como para amenizar la reunión de negocios con sus clientes chinos con un bife que sale de las cocinas contiguas. Ese sí tiene estilo argentino.
“Hemos decidido renovar las fotos. Ya no tenemos el típico bife de chorizo a la plancha o a la parrilla. Acá la base de la alimentación es la carne hervida entonces nos adaptamos a lo que el mercado quiere”, dice Carlos Alberto Vueguen, director General de Ipcva.