Mantuvo relaciones sexuales con la mayor, cuando tenía 14 años, y engendró dos niñas con ella. Podría tratarse de la hija que un matrimonio ‘amish’ le habría vendido.
Un hombre del este de Pensilvania, identificado por las autoridades como Lee Kaplan, se enfrenta a cargos por abusos contra menores después de que la Policía hallara en su vivienda a doce niñas viviendo con él, quien a su vez confesó haber mantenido relaciones sexuales con una de ellas, cuando ésta tenía 14 años, y otra niña podría tratarse de la hija que un matrimonio de una comunidad ‘amish’ le habría vendido.
Kaplan, de 51 años, ha reconocido que engendró a una de ellas, de seis meses, y a otra de tres años con la mayor de las doce, ahora de 18 años.
Las autoridades detuvieron a este hombre en su casa de Feasterville, a unos 30 kilómetros al noreste de Filadelfia, este jueves, tras recibir una queja por la salud y la seguridad de los «numerosos niños» que vivían en la casa, según recoge la cadena estadounidense CBS.
Según una declaración jurada ante el Departamento de la localidad de Lower Southampton, el residente de la vivienda había dicho a los vecinos que no vivía ningún niño allí. Una vez en la vivienda, la Policía descubrió a las 12 niñas.
Dos hijas
El ahora acusado ha reconocido haber mantenido relaciones sexuales con una de ellas cuando tenía 14 años, y de estas relaciones habrían nacido dos: una de tres y otra de seis meses. La chica, ahora de 18 años, le ha dicho a las autoridades que ella es la madre de las dos pequeñas pero que no está casada con Kaplan.
La Policía cree que la niña es de una comunidad ‘amish’ del condado de Lancaster, y se baraja la posibilidad de que fuera vendida por los propios padres de la menor a Kaplan. Los padres de la niña también han sido detenidos.
Según el diario ‘Bucks County Courier-Times’, la pareja había «regalado» a la niña a Kaplan porque se encontraban en una situación de «ruina financiera» cuando abandonaron la comunidad «amish».
Las autoridades han indicado que no existen certificado de nacimiento de ninguna de las niñas, y que no están escolarizadas en ningún centro.
Kaplan se enfrenta ahora a varios delitos, entre ellos los de estupro, asalto indecente de una menor de 16 años y contacto ilegal con menores. Todas ellas han sido puestas bajo disposición de los servicios de menores.