Una de las comunicaciones habría sido al celular de una de las monjas
El detenido ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo, José López, llamó en reiteradas ocasiones al convento de General Rodríguez y a un teléfono que pertenecería a una de las religiosas que vive allí antes de ser sorprendido arrojando bolsos con unos 9 millones de dólares en el lugar.
La información se desprende del análisis del teléfono celular de López, desde el que habría hecho por lo menos 40 llamadas en las 24 horas previas a su llegada al lugar, según informaron fuentes judiciales.
De esos llamados, la Justicia ya detectó los hechos al convento y a una línea que estaría registrada a nombre de una de las religiosas que viven allí, la hermana Alba.
El teléfono de López, detenido en la cárcel de Ezeiza y acusado por enriquecimiento ilícito y portación ilegal de arma, tuvo llamadas entrantes y salientes en ese lapso.
En la causa a cargo del juez federal Daniel Rafecas y del fiscal federa Federico Delgado, se pudo reconstruir algo del trayecto hecho por López en esas horas.
El ex funcionario habría ido desde su casa en la zona del Dique Luján, en el Delta bonaerense, a un edificio en el barrio porteño de Recoleta y, luego, pasó por Benavídez y la zona de Nordelta, en el Tigre, según las antenas de las empresas telefónicas.
Delgado ya pidió informes a las compañías de teléfonos sobre la titularidad de los números a los que López llamó o que figuran llamándolo.
En tanto, Delgado pidió ayer datos de un avión privado que pertenece al contador Andrés Galera, muy cercano al ex secretario de Obras Públicas José López.
Según se reveló recientemente, la aeronave, matrícula LV FVT, estaba estacionada en el aeropuerto de San Fernando la madrugada del 14 de junio. El aeropuerto se cerró a las 0.15 de ese día por un accidente. Delgado quiere saber los últimos vuelos del avión Citación III, propiedad de Galera. También reclamó a la empresa YPF que informe las últimas cargas de combustible.
Si López tenia un plan para escapar por San Fernando, se cayó de manera imprevista 50 minutos antes de la salida de su casa.