Así lo aseguró el secretario de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), Roberto Cipriano en la 99.9 al referirse a la denuncia que presentaron contra el actual fiscal general de Mar del Plata. “Era un agente que prestaba servicios en la DIPBA de San Martín, se infiltraba en reuniones y generaba informes”, puntualizó.
Sin dudas ha sido la gran noticia de las últimas horas. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) realizó una denuncia contra el fiscal general de Mar del Plata, Fabián Fernández Garello acusandolo de participar en delitos de lesa humanidad. Justamente para brindar más detalles de esa participación que se investigará, el secretario de dicha entidad Roberto Cipriano, habló en la 99.9.
“El archivo de la Dirección de la Inteligencia de la Policía Bonaerense que la Comisión por la Memoria custodia desde el 98 es muy grande. Reúne espionaje de la década del 40 hasta 1998 incluyendo la Dictadura. Se ha ido digitalizando y nunca fue un archivo que se utilizó para hacer espionaje ni buscar antecedentes”, aclaró inicialmente sobre la aparición de esta denuncia después de tantos años.
Incluso relató que en realidad se toparon con este tema de casualidad, investigando otras situaciones: “en el marco de información solicitada para un crimen de lesa humanidad que es la muerte de Ana María Martínez asesinada en el año 81, buscamos información de la DIPBA San Martín y nos encontramos con que Fernández Garello era un agente que prestaba funciones ahí. Fue algo aleatorio, no lo salimos a buscar. Nos enteramos hace 15 días aproximadamente, lo chequeamos, lo informamos al juzgado y a partir de eso, hicimos la comunicación junto con la presentación en la Justicia Federal”, remarcó.
La función que cumplía el actual fiscal general de nuestra ciudad era infiltrarse y generar informes. Cipriano agregó que “se llegó a infiltrar en una reunión de Madres de Plaza de Mayo con el Episcopado, además de reuniones en cooperadoras escolares y en distintas organizaciones sindicales para después hacer informes”.
Desde allí, pudieron llegar a la relación que había tenido con distintos casos que terminaron en delitos: “hay informes suyos dentro de la delegación que integraba en el caso de Martínez, pero aparece claramente en el caso de otros tres militantes del partido comunista que está bajo investigación en el juzgado de San Isidro. Trabajaban de manera articulada con el Ejército, el Batallón 601”.
Lo concreto es que hay elementos que la CPM considera muy importantes para que no sólo sea investigado, sino que además pueda llegar a juicio: “Fernández Garello aparece siendo parte del secuestro y la detención de estos tres militantes que declararon luego que eran las mismas personas quienes lo torturaban reconociendo voces porque estaban encapuchados. Las pruebas que hay contra Garello son muy contundentes”, concluyó.