Una encuesta elaborada por Opina Argentina marca que Mauricio Macri mantiene una imagen positiva del 55%, pero los números se invierten cuando se trata de las áreas de gestión. Vidal, muy alta.
Al cumplirse el primer año de gobierno, en la Casa Rosada pueden respirar tranquilos, de acuerdo con el resultado de la encuesta nacional que le asigna a la imagen del presidente Mauricio Macri un 55% de valoraciones positivas. Y si se tiene en cuenta el peso específico de la provincia de Buenos Aires, el placer debe ser doble, al verificar que la gobernadora María Eugenia Vidal es la figura con mayor imagen positiva, con un 66% de valoración en ese sentido.
Ese es el resultado de un sondeo de opinión realizado para DIARIO POPULAR por Opina Argentina, consultora que evalúa mensualmente la valoración de las principales figuras políticas del país y las opiniones sobre la coyuntura política económica y social. En este caso, a punto de cumplirse un año de la gestión de Cambiemos, elaboró un informe que condensa el análisis de esos primeros 12 meses del gobierno de Mauricio Macri, que permite verificar que a pesar de la crisis mantiene una elevada imagen.
Claro está que la recesión no es inocua: desde el inicio de su gestión al presente, el primer mandatario dejó en el camino 15 puntos en imagen positiva. Arrancó con un pico de 70% de valoración positiva, contra un 27% de opiniones negativas. Esas consideraciones se elevaron al 41% del presente, mientras que la imagen positiva se mantiene más alta que la negativa, en 55 puntos. Para Argentina Debate, no haber realizado un ajuste ortodoxo, sumado a una política comunicacional que pone de relieve los atributos favorables del Presidente y resalta de forma eficiente los contrastes con la anterior gestión de gobierno, han permitido mantener el balance positivo de la imagen de sus principales referentes (Macri y Vidal), combinado con un también diferencial positivo en la evaluación general de la gestión.
Un análisis mensual de la evolución de la imagen presidencial permite observar que tras ese inicio tan ponderado, los porcentajes fueron decreciendo hasta llegar al 52% en mayo, con un 44% de valoración positiva, para pegar un respingo al mes siguiente y llegar al 61% de imagen positiva, contra 36% negativa. Fue cuando se aprobó el proyecto de Reparación Histórica para los Jubilados y el blanqueo de capitales, debate que atravesó todo el mes de junio.
El trabajo elaborado para este medio advierte que la imagen presidencial solo se vio amenazada durante los meses de julio y agosto, cuando la crisis de las tarifas. En efecto, julio fue el mes en el que más cerca estuvieron las imágenes positiva y negativa, cuando solo dos puntos separaron ambas valoraciones.
En el caso de María Eugenia Vidal, la gobernadora tiene hoy apenas tres puntos menos que al inicio de su gestión, habiendo tocado el punto más bajo en junio y julio, con un elevado 58% positivo. La imagen negativa más elevada se registró en el mes de julio, con un 35%, que hoy ha descendido al 26%.
Señala el estudio que la imagen del Presidente, la gobernadora y su gestión presentan valores homogéneos de acuerdo con edad y género. Los mayores de 50 años prestan un apoyo superior al promedio, llegando al 60% de opiniones positivas. “Probablemente un reconocimiento a la Ley de Reparación Histórica”, advierte el trabajo.
En lo que hace a la gestión presidencial, propiamente dicha, la imagen positiva es del 50%, contra un 41% de opiniones negativas. Fue en el mes de julio cuando por primera y única vez se invirtieron los valores, al sumar la imagen negativa 50 puntos, contra 43 de la positiva. La situación se recompuso al mes siguiente y desde entonces la diferencia positiva fue mayor de 8 puntos.
El análisis hace también un zoom sobre la evaluación de la ciudadanía en torno a las principales áreas de gobierno. En ese sentido, el apoyo que en grandes trazos recibe el gobierno tropieza cuando se indaga en los aspectos particulares de la administración y sus principales políticas, señala Opina Argentina. Obviamente la política económica ha sido una de las principales dificultades en este primer año. Sin embargo, más allá de que la sociedad asigna una importante responsabilidad a la gestión anterior por la actual coyuntura, el gobierno no logra obtener una nota positiva en su política económica desde mayo.
Lo mismo sucede con las políticas de generación de empleo y de cuidado de las fuentes de trabajo. En este punto, la evaluación negativa es aún más extendida. Desde marzo, entre una mayoría de entre un 40 y un 50% de la población considera que la actual administración no tiene políticas eficaces para cuidar el empleo y las fuentes de trabajo.
Estas calificaciones parecen ratificar la percepción social de que el gobierno de Cambiemos tiene dificultades estructurales para resolver las preocupaciones de los sectores sociales más postergados.
La desaprobación de políticas sectoriales no se circunscribe a las relaciones con la economía. La seguridad, uno de los bastiones de la campaña electoral PRO, también muestra niveles de desaprobación desde marzo. En noviembre llegó a un 51% de rechazo, con picos de 54 puntos en agosto y setiembre.
CÓMO VE EL ELECTORADO LAS IMÁGENES DE CRISTINA Y MASSA
Pese a los innumerables e intensos cuestionamientos políticos y judiciales que atravesó durante su primer año fuera del poder, Cristina Fernández de Kirchner mantiene respaldos que giran en torno a un tercio de la sociedad.
Al analizar sus apoyos, estos parecen haber llegado a un piso que no se perfora ni aun frente a situaciones críticas, tales como el episodio protagonizado por su ex secretario de Obras Públicas José López, descubierto con las manos en la masa en un caso de corrupción por el que está preso. Ni siquiera con los procesamientos que la involucran y hechos irregulares que salpican a la ex presidenta.
En efecto, la ex presidenta hoy tiene prácticamente la misma imagen positiva que al dejar el poder. Arrancó en enero con un 35%, mientras que hoy tiene 36 puntos en contra.
Sin embargo, los niveles de rechazo cercanos al 60% parecen indicar que su techo no está muy lejos. Según el trabajo de Opina Argentina, la imagen negativa arrancó en un 62% y hoy es del 61%, con picos del 66 y el 65% en abril y octubre pasado.
Diferente es el caso de Sergio Massa, quien logra alcanzar niveles de valoración cercanos a los de los principales referentes del gobierno, situándose en opiniones favorables que promedian el 50% de la población.
El sondeo de Opina Argentina le da 54 puntos de imagen positiva, aunque también hay que tener en cuenta que arrancó allá por enero con un 68% en ese rubro. De todos modos, su imagen positiva nunca fue inferior al 52%, porcentaje alcanzado en septiembre, cuando en consecuencia marcó la imagen negativa más alta (43%).
Estos números lo sitúan como el dirigente opositor mejor valorado. No obstante, esta valoración presenta límites. Muchos de quienes manifiestan una opinión positiva del líder del Frente Renovador, conforman los apoyos del gobierno nacional. Esto prefigura una dificultad para traducir estos apoyos en votos.
La última medición hecha por Opina Argentina se realizó entre el 28 y el 30 de noviembre. Se midieron mil casos en Capital, 24 partidos del Gran Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Mendoza, Tucumán, Mar del Plata, San Juan, Neuquén, Resistencia, Río Cuarto, San Rafael, Concordia, Rafaela, General Roca, Crespo (Entre Ríos), Rivadavia, Monte Hermoso, San Pedro (Misiones), Tres Lomas (Buenos Aires), La Unión (Salta) y Tolhuin (Tierra del Fuego).
El sistema fue a través de encuesta telefónica a hogares.