La diputada nacional Alejandra Martínez habló en la 99.9 sobre el fallo que condenó a Milagros Sala a tres años de prisión en suspenso por daños agravados y señaló que en el caso de la líder de Tupac Amaru: “no se trata solamente de la corrupción tremenda de haberse quedado con la plata de más de 2.300 viviendas, sino que esto otro también, el imperio del terror y la violencia permanente”.
La condena que recibió Milagros Sala es el primer paso fuerte que ha dado la justicia y para todos los que políticamente están tratando de que este tema llegue judicialmente hasta las últimas consecuencias, ha sido un bálsamo absoluto.
La situación que vivió en estos últimos años en Jujuy no ha sido nada sencillo y lo detalles los comentó en la 99.9 la diputada nacional de la UCR Alejandra Martínez: “ha sido un gran paso contra la impunidad que instaló el kirchnerismo. La situación que vivimos los jujeños tiene pocos ejemplos en la historia argentina con los que pueda equipararse”, indicó.
Luego puntualizó que “fue un período muy oscuro, de mucho terror. Había un estado paralelo donde la gente más vulnerable estaba en un estado de desprotección porque sus necesidades los hacían presa de este gobierno paralelo que por darle cualquier beneficio los subordinaba dejandolos en una situación de violencia constante donde ella misma se encargaba de ponerlos en su lugar si hacían algo que le disgustaba. Los golpeaba personalmente delante de una asamblea, ha sido atroz”.
Lo que preocupa en dicha provincia es que todo llegue a la instancia judicial porque no se trata sólo de corrupción, sino que la violencia ha sido la característica más preocupante de la forma en la cuál se manejaba Sala: “no se trata solamente de la corrupción tremenda de haberse quedado con la plata de más de 2.300 viviendas, sino que esto otro también, el imperio del terror y la violencia permanente”.
Durante muchos años, el gobierno nacional le proveyó a Milagros Sala, pero también fue cómplice en ese período el gobernador Eduardo Fellner: “para que esto se inicie hubo acción y omisión, hubo complicidad. Desde el poder nacional, directamente Cristina Kirchner enviaba dinero sin ningún tipo de control y el gobierno de Fellner tenía un constante trabajo común”. Ahora lo que pretenden es que las garantías están aseguradas para todos, volviendo a la forma en la cuál los jujeños querían vivir: “somos una provincia de paz y debe quedar siempre visible. No tenemos que responder a las agresiones y pedir las medidas de seguridad que corresponden. Vivimos en un estado de derecho que es lo que tanto tiempo esperamos”.
En este primer fallo de la justicia, se pudo ver según la diputada Martínez, un alivio en la población: “durante el juicio hubo un grupo pequeño de personas apoyando a Milagros Sala. Cuando ella llamaba, juntaba muchas personas porque no tenían otra opción, si se enteraba que no iban eran severamente castigados. Lo que pasó ayer fue que la gente que quiso fue y la que no, no fue. Se sintieron algunos bocinazos y expresiones de conformidad respecto de la resolución de la justicia”.
Incluso, aunque no está relacionada directamente con las causas por violencia, remarcó que fue un bálsamo para las víctimas: “esta medida es muy importante aunque no esté en las causas en las cuáles atestiguaron las víctimas de Milagros Sala, siento que es una reparación para toda la gente que fue intimidada por ella”, concluyó.