El Ministerio del Interior confirmó que el 2 de febrero habrá una reunión con los gobernadores para discutir el reparto de fondos coparticipables.
Tras las críticas de los gobernadores por la millonaria transferencia extra a la provincia de Buenos Aires, el gobierno confirmó ayer que avanzará con las provincias en un nuevo esquema de coparticipación federal y anunció para principios de febrero una reunión para tal fin con todos los mandatarios provinciales.
El secretario de Interior de la Nación, Sebastián García De Luca, dijo que “el próximo 2 de febrero” se realizará una reunión con gobernadores para “avanzar obligatoriamente en un nuevo esquema fiscal”.
Además, defendió la transferencia de 25.000 millones de pesos a la provincia de Buenos Aires y advirtió: “No hay una discusión donde queramos hacer kirchnerismo con la obra pública”.
Ante las críticas de algunos mandatarios provinciales por esos fondos extra de Nación a Buenos Aires, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, afirmó que reclaman “lo justo” y advirtió que esa provincia “tiene la mayor cantidad de pobres del país”.
“Cuando damos el debate de coparticipación con los gobernadores, siempre se dice que Buenos Aires es rica. Pero la verdad es que recibe sólo la mitad de lo que aporta y tiene la mayor cantidad de pobres del país. Por eso merece ser tratada no de manera distinta, sino justa. No pedimos más de lo que nos corresponde, pedimos lo justo”, aseguró Vidal.
En tanto, De Luca señaló que seguirán “dando la pelea en la Justicia” para recuperar la partida que le corresponde a la provincia de Buenos Aires por el Fondo del Conurbano.
Vidal explicó que los fondos servirán “para cubrir parte del déficit de 2016”, y si bien dijo que “parecen muchos millones”, remarcó que “la provincia es grande y sólo en sueldos” se gasta ese monto “en un mes”.
Desde el gobierno nacional, De Luca salió también a defender la transferencia de 25.000 millones de pesos para la provincia de Buenos Aires.
“Todos saben la realidad de la provincia de Buenos Aires, cómo se la ha perjudicado en aquella distribución de la coparticipación y la creación del Fondo del Conurbano, que es a la que menos beneficia”, resaltó.
El funcionario dijo que tal situación la han “conversado con todos los gobernadores y todos reconocen la necesidad de la provincia” y agregó que contemplan “la necesidad que tiene Buenos Aires y el conurbano con un fondo totalmente desactualizado”.
“Por eso hemos decidido enviar esos fondos de la parte que afecta al gobierno nacional”, puntualizó.
Consultado sobre un futuro encuentro con mandatarios provinciales, tras las críticas de algunos de ellos sobre esa transferencia, De Luca confirmó que habrá una “primera reunión el 2 de febrero”, algo que se formalizará “en las próximas semanas”, pero advirtió que “hay que avanzar obligatoriamente en un nuevo esquema fiscal”.
“Hay que terminar con la Argentina unitaria, hemos llevado adelante la tendencia federal”, subrayó el funcionario de la cartera a cargo del ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
En tanto, reconoció que “todos los gobernadores hacen sus reclamos defendiendo los intereses de cada provincia”
“Son reclamos que los hemos escuchado como nunca los han escuchado en la última década, no solamente en los últimos 12 años, de lo que ha necesitado cada gobernador en temas financieros y obras”, dijo.
Por tal motivo, insistió con que los fondos transferidos a Buenos Aires significan “darle a la provincia sin perjudicar a ninguna otra provincia del país”.
Consultado sobre si el gobierno utiliza la obra pública para hacer campaña electoral, De Luca aseguró que “no es nuestra forma de ser, la obra pública se determina en base a las prioridades de gestión”.
“Hemos avanzado inclusive con obras en Santa Cruz, La Rioja, Formosa, La Pampa, donde avanzamos en más de 1.200 viviendas con un gobernador (Carlos Verna) con quien tenemos una relación difícil, la obra pública no ha tenido que ver en la cuestión política, ha marcado diferencia, no hay una discusión donde queramos hacer kirchnerismo con la obra pública”, enfatizó.
En tanto, aclaró que “hay que ir ordenando las cuentas fiscales, cuando sale más plata de la que entra, inevitablemente algo hay que ordenar” y afirmó que “hace falta reducción de gastos innecesarios”.
“Durante el año pasado, los gobernadores y nosotros hemos demostrado una enorme madurez política y más allá de la elección, va a seguir la relación moderada y constructiva”, manifestó.