El concejal presidente del comité local de la UCR opinó sobre la decisión del Intendente de prohibir las fiestas electrónicas en la ciudad de Mar del Plata. Aseguró que les llamó la atención la decisión ya que era un tema que estaba siendo debatido en el Concejo Deliberante.
El concejal Mario Rodróguez expresó su sorpresa ante la decisión del intendente Carlos Arroyo de prohibir las fiestas electrónicas. “Nos llama la atención porque en el Concejo Deliberante se había llevado adelante una jornada de trabajo y se estaba consensuando un proyecto que reglamentaba la realización de espectáculos públicos entre los cuales se hacía una consideración especial a las fiestas electrónicas. Esto venía tratándose en el concejo buscando una fórmula de consenso como para plasmarlo en una ordenanza y en el medio bueno, surge esta decisión del intendente de directamente prohibir la realización de estos espectáculos masivos. Así que creo que se ha terminado la discusión en el Concejo“.
Rodríguez halagó el trabajo que venía haciendo la municipalidad para desbaratar las fiestas ilegales, y consideró que desde el municipio debería haber mantenido esa línea, de controles estrictos para no permitir fiestas ilegales, y mucho trabajo con las fiestas legales. “A mi me parece que se habría que haber discutido mucho más, que había muchas fórmulas intermedias, pero bueno, es la decisión que ha tomado el intendente“. Además, mostró preocupación de que esta medida haga crecer la cantidad de fiestas clandestinas. “Lo que sí creo es que prohibir las fiestas legales va a haber que redoblar el esfuerzo por controlar las ilegales, porque automáticamente van a empezar a surgir la realización de estas fiestas ilegales, difundidas por redes sociales, y que merecen desde el estado municipal seguir prestando atención al tema. Hemos prohibido las fiestas legales y ahora vamos a tener que controlar mucho más la realización de las ilegales, que son además mucho más peligrosas porque se dan en ámbitos que de ninguna manera están preparados ni en su espacio ni en la contratación de por ejemplo ambulancias o personal de seguridad, con lo cual me parece que el estado municipal tendrá que hacer un control mucho más estricto“.
Finalmente, criticó al intendente por haber tomado un camino “sencillo”. “Es mas sencilla en un punto esa decisión de prohibir las fiestas (…). Pero en este contexto hubiera preferido un trabajo mancomunado, entre el estado municipal y el provincial, trabajando en el control de estas fiestas y un combate sí despiadado contra las fiestas ilegales, en las cuales quienes acuden están a la buena de Dios. Pero bueno, se prefirió la prohibición, y esto no garantiza que las fiestas terminen, las que terminan son las legales, a partir de ahora toda fiesta que se realice de este tipo será ilegal“.