El consultor Jorge Giacobbe expresó sus conclusiones a través de la 99.9 sobre el paro nacional y la reacción del estado: “hemos vivido más de 12 años donde daba la sensación que el estado no sabía que hacer con los reclamos que tomaban el espacio público”, indicó.
El paro nacional del 6 de abril ha dejado en el centro de la escena la reacción del estado que fue distinta a todo lo que se ha visto en las últimas décadas. El consultor Jorge Giacobbe (hijo) tuvo interesantes conclusiones en la 99.9 al respecto.
“Hemos vivido más de 12 años donde daba la sensación que el estado no sabía que hacer con los reclamos que tomaban el espacio público. El estado cambió el switch y ojalá pueda ser razonable y que haga lo que tiene que hacer, sin excesos”, indicó.
También remarcó que las manifestaciones que se hicieron una mínima porción del pueblo argentino: “hace 30 años, a la política se le ponía más el cuerpo que la cabeza, pero hoy la lógica es inversa porque también la tecnología lo permite. Ayer vimos en la protesta solamente a la izquierda que además esperaba el discurso de Jorge Altamira que perdió las internas de su propio partido con 0,4% contra 0,8% de Nicolás Del Caño. Lo que vimos ha sido nada”, sentenció.
De acuerdo a las cifras que han recabado en los distintos estudios que llevaron adelante, los números dan para que cualquier fuerza política pueda llenar plazas. “La cantidad de personas que se define como kirchnerista es del 7% y si a eso le sumás otro 7% de peronistas, tenes un 14% que es kirchnerista y con ese porcentaje sobre los 30 millones de argentinos que votan, llenás 720 plazas. Del otro lado está el 10% que se define PRO y otro 10% que se define UCR y con eso llenás muchas plazas también. Pero hoy, llenar una plaza no es gran cosa. Son 20 micros de dos intendentes del conurbano que levantan el teléfono y dicen llenemos la plaza”, minimizó.
Pero su reflexión sobre los distintos movimientos anti y pro gobierno, que se han visto en las últimas semanas, no eran necesarios porque existe un mayor número de personas en el país que no sale a la calle, sino que hace sus propias elecciones de manera silenciosa. “Lo que digo yo es que no había nada para salvar, ni nada en riesgo. La opinión pública que no está enganchada en la política, que es más del 50%, lo que hace es apretar los dientes, aguantar, cruzar el desierto descalzo y todavía confiar en Macri. Cuando se canse de Macri, lo que harán es esperar a la próxima elección y sacarlo del gobierno; no saldrá a golpear a la calle”, analizó.
Los métodos empleados por la izquierda, tienen que ver además con viejas costumbres que ya no tienen que ver con la vorágine de la situación actual. “Todas las fuerzas de la oposición tiene miedos viejos. Se ocupan de las cosas del pasado, con las formas del pasado. Esto va a cambiar cuando cambien las generaciones. Los más chicos tendrán que preocuparse porque los grandes no les pasen sus taras”, concluyó.