El Gobierno británico cree que “probablemente” el atacante no actuó solo.
La policía británica ha detenido este miércoles en el sur de Mánchester a otras tres personas por su vinculación con el atentado del lunes, ha informado la policía en un comunicado que recoge la agencia France Presse. Con estas detenciones ya son cuatro las personas arrestadas por su relación con el ataque. El Gobierno británico cree que el terrorista suicida, identificado como Salman Abedi, “probablemente” no actuó solo. Así lo ha afirmado este miércoles la ministra del Interior, Amber Rudd, en una entrevista concedida a la BBC. “Fue devastador y más sofisticado que algunos de los ataques que hemos visto con anterioridad, y parece probable que [el atacante] no estuviera actuando solo”, ha dicho.
El terrorista suicida, ha informado la ministra del Interior, estaba bajo el radar de los servicios de inteligencia. Según el relato de diversos medios británicos, Abedi habría viajado a Lybia a principios de este mes y habría regresado hace tan solo unos días. La investigación se centra ahora en determinar si contaba con apoyo en Reino Unido, como parece sugerir la relativa sofisticación del ataque: los materiales para fabricar la bomba, el montaje de la misma y la elección del objetivo indican una elevada planificación. El lunes por la noche, Abedi hizo estallar su carga explosiva, transportada en una mochila, en el pabellón Manchester Arena cuando acababa de finalizar un concierto de Ariana Grande. Al menos 22 personas murieron, entre ellas menores de edad, y otras 59 resultaron heridas, 18 de ellas en estado crítico.
La primera ministra británica, Theresa May, anunció este martes que Reino Unido eleva a “crítico”, es decir, al máximo, el nivel de alerta terrorista tras el atentado de Mánchester. La medida supone que las autoridades del país se preparan para “un atentado inminente”. La ministra del Interior ha informado este miércoles de que se desplegarán hasta 3.800 soldados por las calles del país. Y la policía de Londres ha anunciado que pedirá al Ejército que ayude a proteger lugares estratégicos, incluyendo el palacio de Buckingham, el Parlamento o las Embajadas. El nivel de alerta era desde 2014 “severo”, el segundo más alto de una escala de cinco. La última vez que se alcanzó el nivel “crítico” fue en julio de 2007, tras un incidente terrorista en el aeropuerto de Glasgow que se produjo un día después de unos atentados con coche bomba frustrados en el centro de Londres.
Manchester ha amanecido nublado. La ciudad trataba de volver a la normalidad, pero la presencia de agentes armados lo impedía. En la céntrica plaza de Albert Square los vecinos seguían depositando flores, velas y cartas en homenaje a las víctimas.
La ministra del Interior ha manifestado su confianza en los servicios de inteligencia. “Sabemos que [el terrorista] era un conocido de los servicios de inteligencia”, ha indicado. Y ha precisado: “Los servicios de inteligencia conocen a mucha gente. Esto no quiere decir que puedan arrestar a todo el mundo que conocen”. Rudd ha afirmado que cree que “ha sido confirmado” que Abedi había regresado de un viaje a Libia, pero ha puntualizado que a medida que se avance en la investigación irán conociendo más datos.
La ministra ha considerado “irritante” que la información acerca de la investigación sobre el atentado fuera filtrada a la prensa por fuentes de seguridad estadounidense antes de que la policía británica estuviera preparada para hacerla pública. Se refiere a la identidad del atacante, que el inspector jefe de la policía de Mánchester confirmó este martes por la tarde después de que varias fuentes estadounidenses hubieran revelado el nombre de Abedi.