La poderosa tormenta tropical se encaminaba hoy hacia la península de Yucatán.
La tormenta tropical Nate se dirigía el viernes a los populares centros turísticos de la península mexicana de Yucatán tras dejar al menos 22 muertos, decenas de desaparecidos y miles de personas en riesgo en Centroamérica.
Nate estaba el viernes a 370 kilómetros al sureste de la turística isla mexicana de Cozumel con vientos máximos sostenidos de 72 kilómetros por hora, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH) en Miami .
El centro de la tormenta se movía a 23 kilómetros por hora con rumbo noroeste, con lo que el CNH prevé que llegue el viernes al borde este de la Península de Yucatán, donde están los centros turísticos Cancún y Playa del Carmen.
En Centroamérica, Nate arrasó con caminos y pueblos, desbordó ríos y derribó árboles, dejando a su paso al menos 11 muertos en Nicaragua , ocho en Costa Rica , dos en Honduras y uno en El Salvador, según autoridades locales de protección civil.
En Costa Rica y en Nicaragua, miles de personas han sido evacuadas por las inundaciones. Varias zonas de ambos países permanecen incomunicadas por vía terrestre debido a los aludes, lo que está complicando las labores de rescate y el envío de ayuda a miles de damnificados en riesgo.
“(Estamos) ayudando a los afectados por los derrumbes, porque el movimiento del viento y el agua ha desbarrancado árboles (sobre las vías)”, dijo Edwin Potome, un operario de 36 años trabajando con un machete para despejar la carretera en Nandaime, una población rural 60 kilómetros al sur de Managua.
El Gobierno costarricense declaró estado de emergencia, cerró las escuelas y envió miles de efectivos policiales y de salvamento a las zonas de la catástrofe, de dónde han sido evacuadas más de 7.000 personas a un centenar de albergues.
“No sabemos todavía cuál es el tamaño del daño, pero es una crisis mayor. Hay comunidades aisladas, se han caído puentes y hay carreteras cortadas, alcantarillas reventadas”, dijo el presidente Luis Guillermo Solís en conferencia de prensa.
El mandatario decretó tres días de luto nacional y pidió paciencia a los desplazados, ya que las inundaciones y la persistencia de las lluvias en algunas zonas hacía peligroso el retorno a sus hogares.
“La situación está mejorando en gran parte del país (…) pero esta situación es engañosa (…) los suelos tienen alta saturación, así como las posibilidades de deslizamientos hacen peligrosa la sensación de seguridad”, advirtió Solís.
Nate se podría fortalecer a huracán cuando impacte el norte del Golfo de México, agregó el centro. Los productores petroleros y gasíferos comenzaron el jueves a evacuar a su personal de las plataformas en la zona.
El sureste de Estados Unidos, de Florida a Texas, se preparaba para la llegada de Nate, que está previsto se fortalezca en un huracán categoría 1 -el nivel más bajo en la escala de 5 utilizada por los meteorólogos- cuando alcance la Costa del Golfo el domingo.
Se espera que la tormenta deje ente 15 y 25 centímetros de lluvia en partes de Honduras y Nicaragua, entre 5 y 10 centímetros en el este de Yucatán y oeste de Cuba, y ente 8 y 15 centímetros en la Costa Central del Golfo de Estados Unidos.