El presidente de la Agrupación Tradicionalista Salteña “Gauchos de Güemes” explicó porque tomaron la decisión de borrar los pañuelos blancos pintados en el monolito que recuerda el lugar donde fue herido Güemes: “lo único que queríamos era mantener el monumento en condiciones”, señaló.
La Agrupación Tradicionalista Salteña “Gauchos de Güemes” tomó relevancia por un hecho particular: decidieron borrar los pañuelos blancos pintados en el monolito que recuerda el lugar donde fue herido Martín Miguel de Güemes y les llovieron críticas.
El presidente de esta Agrupación, Francisco Aráoz hizo su descargo a través de la 99.9 explicando que “se pintaron pañuelos blancos en un monolito, un monumento nacional a nuestro héroe gaucho. Hicimos una manifestación pública el pasado jueves porque hay una ley de protección de monumentos que dice que no se puede intervenir, por lo tanto es un acto de vandalismo”.
Lo que buscaban era, inicialmente, identificar a quienes realizaron esas pintadas pero no tuvieron éxito: “desde entonces no hemos recibido ninguna respuesta de absolutamente ninguna institución. No hemos podido hablar con nadie que diga que ha pintado los pañuelos. Como sabíamos que estaba la marcha el sábado no los limpiamos el viernes, el domingo tampoco limpió la municipalidad y el lunes personas de las agrupaciones gauchas que integran nuestro movimiento hicimos un llamado diciendo que íbamos a hacer está acción de limpieza del monolito de forma ordenada. No queríamos que fuera un acto avasallante para nadie”, comentó.
Cuando los vieron borrando los pañuelos, hubo muchas consultas de los transeúntes a quienes les explicaron la real intención que no tenía que ver justamente con lo que representa ese símbolo: “limpiamos los pañuelos y cuando la gente se acercaba le explicamos que no borrábamos los pañuelos, sino que limpiábamos el monolito. La causa de reclamar por los desaparecidos no tiene nada que ver con mantener los monumentos en condiciones. También lo hicimos con el monumento a Güemes en Berazategui que los bomberos lo usaban para escalar. Creo que eso no es ofensivo para nadie”, dijo Araoz.
Las agresiones contra los tradicionalistas enseguida comenzaron a llegar buscando ofenderlos de distintas maneras, aunque no tenían respaldo alguno: “nos han llegado a acusar de oligarcas, algo que es muy erróneo. El único que es empresario del grupo que fue a limpiar soy yo que tengo una pequeña pyme y le damos trabajo a la gente. Jamás recibí un subsidio de nadie, no tengo casas del estado, ni nada. Todo lo que están tratando de decir, es falso, lo único que queríamos era mantener el monumento en condiciones”, simplificó.
Incluso recordó que mientras estaban limpiando hubo una persona que se encargó de insultarlos reiteradamente: “estuvo 1 hora y 45 minutos por reloj insultándonos. No cualquiera puede estar tanto tiempo a los gritos sin perder la voz y creo que no es la forma. Ayer volvieron a salir y no sólo pintaron el monolito, sino también toda la plaza. El pañuelo usado de esta forma no representa la memoria, verdad y justicia”; dijo.
De todas maneras, tratando de mantener su posición convocó al diálogo con quienes pintaron los pañuelos, aunque sigan sin identificarse: “me gustaría poder hablar con quienes pintaron los pañuelos, pero no hemos podido identificarlos”, reiteró.