El gobierno de Santa Fe junto a las cámaras de la industria del combustible pusieron en marcha un novedoso estudio. Por seis meses los micros urbanos cargarán entre un 25 y un 100% de biodiésel elaborado fundamentalmente a base de forrajes.
Más de 400 colectivos urbanos que prestan servicio en la ciudad de Rosario comenzaron esta semana a funcionar con un 25 por ciento de biodiésel en su combustible, mientras que tres unidades lo harán con el cien por ciento. El ensayo, que durará seis meses, se logró a través de un acuerdo firmado entre el gobierno provincial de Santa Fe y distintas cámaras sectoriales.
La prueba piloto se denomina Experiencia BioBus y busca validar el impacto positivo del biodiésel, que se utilizará como mezcla con el gasoil en un nivel superior al que rige en la actualidad a nivel nacional, que se limita al diez por ciento.
“Ya habíamos hecho una experiencia con camiones de Cliba, que recolecta la basura en la ciudad de Buenos Aires. El gobierno de Santa Fe lo tomó en cuenta para esta prueba, ya que en esa provincia se encuentra el 80% de la capacidad de producción de biodiésel”, destacó Víctor Castro, director ejecutivo de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio).
En este caso, el biodiésel se elabora con aceite vegetal al que se le suma un diez por ciento de metanol, que en Argentina produce YPF. Por cada tonelada de ese aceite más el alcohol se produce una tonelada de biodiésel y un diez por ciento de glicerina, que se exporta tanto cruda como refinada.
El aceite que se utiliza para la fabricación de biodiésel es cien por ciento de soja porque Argentina es uno de los principales productores del mundo y el primer exportador de aceite. “Hay una disponibilidad enorme de materia prima y también hay capacidad de elaboración, tanto para proveer al mercado interno como para la exportación”, aseguró Castro.
Recordó que la ley de Promoción de Biocombustibles permite al ministerio de Energía establecer un mínimo del cinco por ciento para combinar con los combustibles tradicionales. “Ahora estamos en el diez por ciento pero tenemos la oportunidad de elevarlo, falta la disposición regulatoria”, explicó.
Por año se producen en el país 2,5 millones de toneladas de biodiésel, de las cuales un millón se destina al mercado interno y el resto a la exportación, aunque hay capacidad para producir 4,5 millones de toneladas.
Castro se lamentó del cierre de las exportaciones que sufrió el país por parte de Estados Unidos. “Fue una medida arancelaria muy injusta. Se puso como excusa que recibimos subsidios cuando en realidad es todo lo contrario, todo lo que tenemos son cargas tributarias”, señaló. El año pasado la exportación de biodiesel significó ingresos por más de 1.200 millones de dólares.
La Argentina es uno de los países con mayor utilización de biocombustibles. En Brasil se está terminando de implementar un corte del diez por ciento y en Europa hay varios países con un régimen similar. En tanto en Tailandia el corte es superior, llegando al 15 por ciento.
En números
400 son los ómnibus de dos empresas que participarán de la prueba piloto, de ellos 3 lo harán con el 100% de biodiésel.
2,5 millones de toneladas de biodiésel se producen por año. Hay capacidad para duplicarlo.