El ex titular de la SIDE se refirió a las reformas en la Ley de Defensa que introdujo Mauricio Macri y destacó que no tiene nada que ver con lo que se está criticando desde algunos sectores. “Lo que hace el decreto es volver al sentido original de la ley”, explicó.
El proyecto de la Ley de Defensa Nacional que fue aprobada en 1988 tuvo como impulsor a Miguel Ángel Toma. Hoy, cuando las modificaciones implementadas por Mauricio Macri llevan a una protesta por la idea errónea de que se está habilitando a las Fuerzas Armadas a intervenir en cuestiones de conflicto interno, destacó algunos puntos concretos a través de la 99.9.
“Es central como interpretación de la decisión del gobierno, entender la derogación de algunos aspectos del decreto del Presidente Kirchner que ilegalmente modificaba el texto de la ley de Defensa Nacional de 1988 que fue producto del consenso de las fuerzas políticas después del intento de golpe de Semana Santa”, recordó en primer término.
La modificación realizada por Néstor Kirchner terminó desvirtuando absolutamente el objetivo de la misma. “Lo que estaba escrito era que las Fuerzas Armadas debían operar ante cualquier intento de agresión externa. Lo que agrega Kirchner que debe ser cuando se produce por otro estado y a través de un ejército convencional, modificando el concepto. Lo que hace el decreto es volver al sentido original”, aclaró Toma.
Luego cargó contra el kirchnerismo que después fue en contra de la propia modificación que había introducido y nadie se alarmó en ese momento: “hubo una gran hipocresía porque con este decreto se calmaba la conciencia de un sector de la clientela de Kirchner, el progresista, en la práctica se mandaba varios años después a las Fuerzas Armadas a cometer una acción ilegal con casi 5.000 efectivos contra el narcotráfico en la frontera norte. Eso estaba prohibido por el decreto y es de una contradicción increíble”.
Hubo también responsabilidad del gobierno, según lo que indicó el ex funcionario, en que se haya llevado la cuestión a un tema que no tiene nada que ver con la realidad: “el gobierno ha comunicado mal esto y le dejó la pelota picando a los sectores pseudo progresista”, dijo. Luego abundó: “después aparece la hipocresía de estos sectores porque callaron cuando hicieron los operativos en la frontera norte. Los grupos de los derechos humanos terminaron en silencio cuando Cristina Fernández nombró a Milani como jefe del Ejército o cuando transfirió la inteligencia civil a la militar como en las peores épocas del terrorismo de estado porque no le servía cuando no le daba apoyo a la investigación de Nisman”.
Miguel Ángel Toma indicó que se debe actuar con responsabilidad política y se refirió a todas las fuerzas políticas: “de una vez por todas, la dirigencia política tiene que tener el equilibrio de criticar aquello que uno considere que está mal y darle la derecha a aquello que está bien. El camino que se ha iniciado ahora es beneficioso para la sociedad si se mantiene en estos parámetros. El fenómeno de la droga es lo que está generando la violencia en los delitos y no se puede seguir bajo una ideología justificando todo”, ponderó sobre los efectos a futuro.