Invento argentino salvaría 500 mil vidas al año

Se trata de un desarrollo que combate el rotavirus, agente viral que produce infección intestinal y es la causa más común de diarrea grave en niños menores a 5 años. Puede generar deshidratación, la necesidad de hospitalización e, incluso, la muerte. 

Un desarrollo del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) para prevenir el rotavirus, resultó ganador del primer concurso de Inventos Patentados 2018–Prosur, entidad que reconoce al mejor invento de los últimos cinco años de la región.
El rotavirus es un agente viral, que produce una infección intestinal (o gastroenteritis) y representa la causa más común de diarrea grave en niños menores de 5 años. La complicación más frecuente es la deshidratación, que puede generar la necesidad de hospitalización e incluso la muerte. Este virus también afecta a individuos jóvenes de especies productivas como terneras, potrillos y camélidos.
Los niños infectados por rotavirus pueden presentar diarrea líquidagrave que lleva a la deshidratación, nausea y vómito con pérdida de apetito, y en algunas ocasiones fiebre o dolor abdominal.
Según una publicación del periódico ABC, de noviembre de 2017, unos 500.000 niños mueren al año por rotavirus.
Este invento, que lleva como título oficial DOMINIO VHH DIMÉRICO ANTI-VP6, también se alzó con el reconocimiento a la Mujer Inventora, que quedó en manos de las argentinas Lorena Laura Garaicoeachea, Gisela Ariana Marcoppido, y Gladys Viviana Parreno, quienes junto con Thomas Surrey, Aurelien Olichon, Silvia Sebastian Gómez, Jose Angel Martinez Escribano y Andrés Wigdorovitz integran el equipo investigador que está trabajando desde el 2011 en este desarrollo.
El desarrollo participará ahora en la Exposición Internacional de Invenciones de Ginebra, que anualmente reúne a innovadores de todo el mundo y que realiza la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).

La historia del desarrollo

El INTA inició un estudio con camélidos, con anticuerpos derivados de llamas (nanoanticuerpos). Desarrolló y patentó, en el INPI y otras oficinas de Propiedad Industrial, un anticuerpo capaz de neutralizar a diferentes variantes del virus. Los científicos trabajan ahora para lograr que una vaca transgénica permita transmitir en su leche estos anticuerpos. El objetivo es elaborar leche maternizada para que los niños al tomarla estén protegidos contra el virus.
Entre los criterios de evaluación se tuvo en cuenta el potencial para la generación de beneficios sociales, su impacto ambiental, la generación de beneficios económicos, su potencial de internacionalización y su enfoque de género.
Argentina, al igual que los países que integran Prosur, presentó tres candidaturas de patente de invención o modelo de utilidad concedidas hasta cinco años antes de la fecha del concurso, las cuales fueron seleccionadas por las Oficinas Nacionales de la Propiedad Intelectual-ONAPI, y analizadas por un jurado de instituciones internacionales como ABIPIR/IFIA, Instituto Max Planck, Marca Sur y Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

El segundo lugar también fue para un invento argentino

Se trata de una invención perteneciente a Jorge Ernesto Odón, que busca mejorar el proceso de parto, con alta efectividad para las emergencias en obstetricia y de bajo costo.
Este dispositivo está compuesto por una manga que tiene en uno de sus extremos un asa de tracción y en el otro una campana de plástico blando. A través de bolsillos internos, se introducen las espátulas, las cuales se adaptan y sostienen la cabeza del bebé. Luego, se inserta una bolsa, que al inflarse permite extraer el tubo y cuidadosamente se va tirando de la misma para retirar el bebé del útero.
La Organización Mundial de la Salud lo considera un instrumento de gran relevancia, mucho más seguro y fácil de usar que el fórceps o la ventosa obstétrica.
El primer Concurso de Inventos Patentados 2018 Prosur tuvo como objetivo reconocer a personas humanas o jurídicas que cuenten con invenciones que hayan utilizado el sistema de patentes como instrumento de protección y elemento clave para su desarrollo socio económico.
“Es un orgullo para el país que se reconozca la potencia de nuestros inventores. Estamos facilitando los procesos para registrar patentes en la Argentina, para que toda la creatividad y fuerza emprendedora de los argentinos se ponga en marcha y genere valor de exportación”, afirmó Dámaso Pardo, presidente del Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI), organismo del Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación, encargado de patentar el proyecto ganador.