Cada vez se elige menos el verano para las vacaciones

Así lo asegura una encuesta, y la Cámara de Turismo lo confirma. La gente cambió el modo en que se toma vacaciones. Dos de los motivos: los súper feriados a lo largo del año y los precios de la temporada alta.

VeranoLa tendencia lleva varios años y se acentúa cada vez más. La mayoría de los argentinos ya no se toma vacaciones en verano, ya que los períodos de descanso son más cortos y mejor repartidos durante el año. Solo el 25% de los que se toman un descanso lo hace en enero y febrero, según indica una encuesta privada a la que accedió Clarín.
El dato confirma que se consolidó definitivamente un nuevo modelo de turista, potenciado por la política de feriados. Así lo afirman, además, en la Cámara Argentina del Turismo (CAT) y desde los principales destinos turísticos del país.
Cambió el modo de vacacionar de los turistas, coinciden. “Antes, la gente se tomaba hasta un mes de vacaciones en verano. Hoy, la mayoría hace escapadas cortas de 3, 4, y 5 días”, dicen los operadores turísticos.
La encuesta fue realizada por Trabajando.com, en base a 2.267 encuestados de todo el país. La mayoría de quienes contestaron son mujeres (63%) y el 55% tiene más 27 años y estudios universitarios.
A quienes respondieron que se irán de vacaciones en enero y febrero, les preguntaron qué harán en ese tiempo. El 63% respondió que viajará dentro del país.
En los últimos 20 años, la modalidad de descanso de los argentinos se redujo en tres etapas, explica Pablo Molouny, gerente general de Trabajando.com: “hace décadas, la típica era cargar a full el auto y tomarse un mes entero. Tiempo después, ese período pasó a tres semanas. Luego, a una quincena. Y ahora se redujo a menos de 10 días”.
También, cada vez más gente opta por tomarse vacaciones fuera de temporada. Los motivos son varios: los precios fuera de temporada bajan hasta un 50%, el mercado ofrece más promociones en pasajes y paquetes para viajar al exterior, y hay menos gente en todos lados, en las playas, en los restoranes, en las rutas.
Para el presidente de la CAT, Oscar Ghezzi, “la consolidación del nuevo turista argentino también tiene que ver con la política de ordenamientos de feriados, que otorga previsibilidad al calendario de fines de semana largos. Y, además, con la flexibilidad de los prestadores turísticos del país que han adaptado la oferta”. Hoy, además de los feriados y fines de semana largos de 2014, ya se conocen los de 2015 y 2016. Este año habrá 10 fines de semana largos, de los cuales 4 serán de 4 días cada uno. Y el resto, de 3 días.
Según datos de la CAT, los principales fines extra-largos de 2013 (Carnaval, Semana Santa más el 2 de abril, 20 de junio, 17 de agosto, 12 de octubre y 20 de noviembre) significaron un movimiento turístico de 8,5 millones de turistas por los destinos del país. La mitad salió de Capital y el Gran Buenos Aires, y la otra mitad del interior del país. Todo eso generó un impacto económico de más de 7.500 millones de pesos en las economías regionales.
El gasto promedio diario osciló entre 276 y 305 pesos, aproximadamente. La estadía promedio fue de 3 noches. Representa cerca del 32% del movimiento turístico total del país. Pese a todo, están también quienes por razones económicas no pueden tomarse vacaciones. Otra encuesta, en este caso elaborada por TNS Argentina, muestra que en 2014 más de la mitad de los argentinos no podrá tomarse vacaciones, principalmente debido a la falta de dinero.
Este trabajo, que fue realizado en noviembre pasado a nivel nacional mediante 1.003 entrevistas personales y domiciliarias, también arroja otros datos interesantes sobre las preferencias y los hábitos de los turistas argentinos.
Señala que el argentino sigue siendo un “turista nacionalista” porque la gran mayoría elige viajar por la Argentina, que es independiente e improvisado a la hora de viajar y que la mayoría prefiere contratar los servicios de las vacaciones por su cuenta, sin depender de una agencia de viajes. En cuanto al gasto individual que harán en las vacaciones de este año, el promedio estimado ronda los 3.500 pesos.