Franco Rinaldi analizó esta mañana en la 99.9 la gestión de Mariano Recalde y fue muy crítico. El autor del libro “Aerolíneas Argentinas, 2000 días de pérdidas” aclaró que “está por debajo de Ethiopian Airlines”. Además, señaló que “los 4.500 millones de dólares que ya recibió Aerolíneas Argentinas en subsidios, han sido prácticamente pérdidas”.
La nota publicada en el diario Clarín sobre los subsidios a Aerolíneas Argentinas y la respuesta del interventor Mariano Recalde, han abierto un nuevo tema de debate que se reitera, pero sigue aportando datos interesantes.
Franco Rinaldi escribió el libro “Aerolíneas Argentinas, 2000 días de pérdidas” y esta mañana se refirió al tema en la 99.9: “con el dinero que Aerolíneas Argentinas recibió por parte del estado en estos 6 años y medios que la empresa está intervenida, podría haber comprado aproximadamente 70 Boing 747, pero la verdad que es sólo adquirió 2”, indicó inicialmente.
En cuanto a los subsidios aclaró que “lo que se debe computar es que los 4.500 millones de dólares que ya recibió Aerolíneas Argentinas han sido prácticamente pérdidas. Hay una cuota grande de corrupción en la empresa y por eso está en investigación la empresa en distintas causas”.
Alrededor del relato que se establece a la hora de hablar de la gestión gubernamental en Aerolíneas Argentinas, se destacan algunos hechos puntuales que Rinaldi prefirió analizar con mayor profundidad. “Cuando se dice que se mejoró el servicio, sobre todo en la parte de cabotaje, se debe establecer respecto de cuando. Si es en relación al peor momento de Aerolíneas en junio de 2008 cuando estaba al borde de cerrar, puede ser, pero nos sale 2 millones de dólares por día. Con respecto de los 90, por ejemplo, no. Nos quedamos con una idea falsa sino de lo que está pasando con Aerolíneas Argentinas”, señaló.
La realidad no es como la están demostrando según los datos que ha recogido en su investigación y hoy la ubica por detrás de una empresa africana: “hoy es la Aerolínea más subsidiada del mundo, incluso está por debajo de Ethiopian Airlines en servicio, en sus finanzas, en los sistemas de cobertura de rutas…es todavía una Aerolínea en tanto y en cuanto tiene aviones y trabajadores con 20 o 30 años de antigüedad que trabajan muy bien, con mucho profesionalismo. Sino sería lo menos parecido a una aerolínea”, comparó Rinaldi.
Los servicios se han perdido de manera notoria cuando hace años se podía decir que era una empresa que podía servir de ejemplo a nivel regional. “Fue una aerolínea modelo de Sudamérica, pero hoy está lejísimo de eso. Cada vez tiene menos destinos internacionales. Ha volado a Londres, París, Frankfurt, llegó a Hong Kong, Sydney, Auckland, Los Ángeles, el DF de México; hoy nada de eso existe”, agregó.
La buena noticia que auguró es que detrás de esta gestión, vendrá otra que no deberá mover demasiado para considerarse exitosa: “la gestión actual es tan mala que con muy poco la próxima parecerá muy buena. Es una ventaja para quien venga”, finalizó.