El Gobierno disuelto sudanés avisó hoy a los militares y a las fuerzas de seguridad que usar la violencia en las grandes protestas convocadas será “contraproducente” para ellos.
Al menos dos personas murieron este sábado y varias resultaron heridas por “disparos” por parte de las fuerzas de seguridad contra los manifestantes en las masivas protestas que se llevan a cabo en Jartum contra el golpe de Estado militar perpetrado el pasado lunes, informó el Comité de Médicos.
“Las milicias del Consejo militar golpista están ahora disparando balas a los manifestantes en Um Durman y otras áreas de la capital. Como resultado, dos mártires murieron y hay varios heridos”, indicó en su cuenta de Facebook la organización, que desde la revolución que derrocó al dictador Omar Al Bashir en 2019 atiende a los manifestantes y contabiliza las víctimas. El comité indicó que uno de los manifestantes murió por un tiro en la cabeza, mientras que otro pereció por una bala en el estómago.
“Afirmamos que nosotros y los revolucionarios estamos vigilando todo y el mundo entero está mirando los crímenes de los golpistas”, dijo la organización, que añadió que “ningún criminal permanecerá impune”. “Cuantos más crímenes cometan los golpistas, más cerca están de su derrocamiento por la ira popular”, concluyó en el mensaje. El Gobierno disuelto sudanés avisó hoy a los militares y a las fuerzas de seguridad que usar la violencia en las grandes protestas convocadas será “contraproducente” para ellos. Sobre las 12.30 hora local (10.30 GMT) comenzaron las grandes marchas desde diferentes barrios de la capital para dirigirse al centro de la ciudad.
Varios países, como Estados Unidos, así como la ONU y la Unión Europea (UE), han llamado a los militares y las fuerzas de seguridad a que eviten la violencia contra los manifestantes, que piden la vuelta de un Gobierno civil tras la asonada del pasado lunes capitaneada por el líder militar, general Abdelfatah al Burhan. La misión especial de la ONU en Sudán también ha hecho un llamamiento a los manifestantes para que protesten de manera pacífica.
Los manifestantes y las fuerzas de seguridad se han enfrentado desde el día del golpe militar en unos choques que han dejado al menos once muertos y más de un centenar de heridos, según han denunciado organizaciones opositoras y Amnistía Internacional.
Al Burhan disolvió el pasado 25 los órganos de transición y declaró el estado de emergencia en el país después de un mes de tensiones entre el estamento militar y los componentes civiles del Gobierno por una presunta intentona golpista el mes pasado.