La acusación, que se dio a conocer hoy, convierte a Adams, exsenador estatal y excapitán de la Policía, en el primer alcalde de esta ciudad en ser imputado mientras está en funciones.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, ha sido imputado con cinco cargos penales, entre ellos soborno y fraude electrónico, tras múltiples investigaciones sobre presunta corrupción en el seno de su administración y la dimisión de varios de sus colaboradores cercanos.
Adams, antiguo capitán de la policía neoyorquina de 64 años, se convierte en el primer alcalde en ejercicio en ser imputado por la justicia.
Cuatro de las cinco acusaciones están relacionadas con la investigación sobre la supuesta recepción de fondos para su campaña electoral de 2021 de empresarios turcos, y otra de soborno.
Al alcalde le “inundaron con regalos”, en particular viajes en clase preferente en la aerolínea nacional turca, hoteles de lujo y comidas, que no fueron declarados, dijo el fiscal del tribunal federal del distrito sur de Manhattan, Damian Williams.
Más benefactores a medida que aumentaba su poder
“Aceptó al menos 100.000 dólares en viajes de lujo de parte de algunos de los actores extranjeros que organizaron muchas de las donaciones a su campaña”, dijo Williams, fiscal del mismo tribunal donde fue juzgado y condenado, también por corrupción y sobornos, el otrora poderoso senador demócrata Bob Menéndez.
“A medida que aumentaba la importancia y el poder de Adams, sus benefactores nacionales y extranjeros buscaron establecer relaciones corruptas con él, especialmente cuando en 2021 quedó claro que se convertiría en alcalde”, indica el texto judicial. Adams “prosiguió sus relaciones de corrupción después de haberse convertido en alcalde”, añade.
Antes de que se anunciaran los cargos, agentes federales registraron a primera hora del jueves su residencia oficial. “Estoy deseando defenderme”, dijo Adams en la primera reacción pública tras conocerse la acusación, rodeado de seguidores frente a su residencia.
“Mi día a día no cambiará. Seguiré haciendo el trabajo para los 8,3 millones de neoyorquinos”, en el cargo de alcalde para el que fue elegido.