Tras el asesinato de Umma, la pequeña asesinada en un intento de robo, el abogado Fernando Soto dijo que “el disparo no fue por el robo, fue porque se estaba yendo el auto. Entonces, por la bronca… le dispararon para matar, le dispararon claramente al centro de la ventanilla donde había un pasajero, entonces eso es pena de muerte de verdad”.
Sobre el accionar de los delincuentes sostuvo que hacen cualquier cosa, porque van caminando, roban un auto, a menos de 12 cuadras, roban otro, van buscando y siguen delinquiendo, y esto evidencia que tienen impunidad, porque saben que cometen un robo y la policía no está ahí. Los vecinos lo saben muy bien también porque no sucede ni cuando ellos llaman a la policía. Si acuden al llamado muchas veces tardan 40 minutos en llegar y muchas veces no llegan nunca. Esa es la realidad de todos los días. “Entonces, cuando obran así es que están desaforados, con un territorio claramente con liberación para actuar. No es que haya un acuerdo, pero es que en la práctica sucede así. Y por otro lado, una vez que son detenidos, muchas veces los vemos, hay jueces que entienden que la víctima es el victimario. La víctima es un tercer espectador, como que no tuviera nada que ver, cuando en realidad es el único que no viola la ley, el único que no quería para nada estar en un proceso penal y le dan un rol menor o ausente y privilegian al imputado y por eso lo liberan anticipadamente, le dan penas menores, hacen una alquimia con el código penal, siempre para beneficiar al delincuente. Y esto no es gratis”, afirmó Soto.