Un nuevo estudio afirma que los jóvenes que toman este tipo de droga tienen en su adultez dificultades para recordar palabras y dificultad para hablar con fluidez.
Un nuevo estudio elaborado por la Universidad de Lausana (Suiza) ha demostrado los temibles efectos que puede tener sobre el organismo la marihuana. Los resultados -calificados de extraordinarios por los propios investigadores- establecen que ha quedado probado que los jóvenes que ingieran este tipo de sustancias ven atenuadas en pocos meses su capacidad para hablar y recordar palabras.
Con todo, la investigación también ha roto moldes al establecer que la marihuana no atenúa las capacidades mentales, no impide pensar con rapidez a largo plazo y no dificulta la toma de decisiones. El estudio, al frente del cual se halla el doctor Reto Auer -jefe de residentes en el departamento de medicina comunitaria de la Universidad de Lausana- ha sorprendido a los expertos. Y no es para menos, pues las conclusiones son devastadoras. «Cuanto más se fuma, más baja será la memoria verbal en un futuro cercano», señala.
El experto también ha explicado que estas conclusiones son solo «asociaciones» realizadas en base a un experimento, y que todavía es necesario incidir más en el tema para corroborar los resultados. Para llegar a estas conclusiones, Auer y su equipo han analizado durante más de 25 años los daños verbales que se han producido en 3.400 hombres y mujeres que -con unas edades entre 18 y 30 años- han ingerido droga. El estudio, concretamente, comenzó en 1985.
Todos los participantes fueron «seguidos» (científicamente hablando) hasta 2011, cuando se empezaron a investigar los resultados en base a las entrevistas realizadas a lo largo de este cuarto de siglo. Casi el 85 por ciento de los participantes dijeron que habían fumado marihuana en algún momento u otro, y -aproximadamente el 12 por ciento- explicó que continuaron haciéndolo en la mediana edad.
En base a una serie de pruebas (como recordar palabras o medir su velocidad a la hora de buscar términos mientras hablaban) se logró determinar que las personas de mediana edad que, durante su juventud habían tomado marihuana (hasta los 25 años) sufrieron una pérdida severa en lo que se refiere a la memoria verbal y a la velocidad de procesamiento mental.
Concretamente, establecieron que, por cada cinco años de exposición a esta sustancia, uno o dos de los «sujetos de pruebas» eran capaces de recordar una palabra menos que aquellos libres de drogas. Según los expertos, los que fuaron marihuana a diario durante un periodo de varios años fueron los más propensos a experimentar el mayor descenso en las habilidades de pensamiento.