Cinco de los fallecidos formaban parte del grupo armado de seis personas que entró en el centro penitenciario del estado mexicano de Guerrero y se presentaron como funcionarios que querían entregar a un detenido.
La Procuraduría General de Justicia del Estado informó en un comunicado que cinco de los muertos eran parte del grupo de seis personas que entró al penal de Tuxpan, en la ciudad de Iguala, y los otros cuatro fallecidos eran reos.
Según las investigaciones, los guardias de la cárcel fueron sorprendidos por integrantes del grupo armado que se hicieron pasar por funcionarios públicos que querían entregar a un detenido, precisó la Fiscalía.
Una vez que entraron en el penal, tirotearon a los presos y también a los guardias de una torre de vigilancia, que respondieron al fuego y allí fueron “abatidos los cuatro reclusos y cinco de los agresores”. Además, uno de los miembros del grupo armado y un vigilante resultaron heridos por arma de fuego y se encuentran hospitalizados.
Personal de la Policía Ministerial de la PGJE junto con las autoridades del centro penitenciario, dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública estatal y del 27 Batallón de Infantería del Ejército Mexicano, recuperaron el control del penal.
El comunicado oficial informa que no aún no se sabe si el grupo armado pretendía liberar a alguno de los reos del penal o asesinar a algún recluso. Además, la Fiscalía precisó que su personal permanece en el interior del Penal de Tuxpan y realiza diligencias tras la incautación de una camioneta robada que fue utilizada por los atacantes.
