El abogado especializado en derecho bancario y financiero y Ex director de casa de moneda habló en la 99.9 sobre la decisión de imprimir un billete de 2 mil pesos y señaló que no resolverá nada para la economía.
El anuncio de un nuevo billete de 2 mil pesos ha generado mucha controversia porque, desde hace un tiempo, se está pidiendo que se imprima papel moneda de valores más grandes para dar soluciones a la economía desde distintos aspectos.
El abogado especializado en derecho bancario y financiero y Ex director de Casa de Moneda; Augusto Ardiles, habló en la 99.9 respecto de lo que representa este nuevo billete: “esto es una nueva expresión de lo que llamo el “plan llegar”, alargar la mecha para que se siga ampliando la bomba. No soluciona nada. El billete de 2 mil pesos nos permitirá ahorrar en 2023, 21 milllones de dólares, ese número queda muy chico al lado de lo que nos podíamos haber ahorrado si imprimíamos un billete de 10 mil pesos que serían 170 millones de dólares”.
Para la gente, tampoco será una solución en su cotidianeidad que es uno de los principales aspectos que le importa a los argentinos: “además de esto, un billete de 2 mil pesos no termina de solucionar nada en la transaccionalidad de la economía porque con una inflación de 100% anual, el billete de 2 mil cuando esté en circulación a finales de este año, valdrá casi lo mismo que vale actualmente el de mil”.
Ardiles forma parte de un grupo de trabajo en la oposición que tiene una propuesta distinta para el futuro: “tenemos que pensar hoy en Argentina con una familia de billetes donde el de mayor denominación tiene que ser de 50 mil y después tener de 20 mil, 10 mil y 5 mil. Obviamente que el resto no va a desaparecer pero hay que simplificar la vida de las personas, no sólo a los bancos por los costos operativos”.
Otro de los aspectos que agregó en el final, es el costo que tiene en realidad imprimir billetes para nuestro país que no es un dato menor: “hay que tener en cuenta que el 70% del costo de impresión de un billete es en dólares porque todos los insumos son 100% importados incluso si lo haces acá. El resto es la mano de obra. Toda la eficiencia que podamos gestionar y realizar en impresión de billetes se traslada a una menor demanda de dólares que hoy escasean”.