Bagdad encuentra una dura resistencia yihadista en Tikrit

Rusia entrega aviones de combate a Irak en plena ofensiva contra los rebeldes. El EIIL proclama el estado islámico en las zonas controladas. El Ejército iraquí lanza una fuerte ofensiva para recuperar Tikrit.

Miles de soldados iraquíes, apoyados por tanques y aviones, luchan desde el pasado sábado en Tikrit, la ciudad natal de Sadam Husein, en la mayor ofensiva del Ejército iraquí contra los insurgentes suníes, que desde el pasado 9 de junio avanzan hacia Bagdad tras controlar varias ciudades al norte de la capital y los puntos fronterizos del país y que acaban de proclamar la instauración de un estado islámico en las zonas que controlan.
Por segundo día consecutivo, el Ejército iraquí intensificó sus ataques en la provincia de Saladino, en el norte del país, para recuperar las regiones en manos de los insurgentes, en especial la capital, Tikrit, a unos 160 kilómetros al norte de Bagdad. “Los soldados avanzan desde diferentes lugares en torno a la ciudad”, aseguró este domingo el portavoz del Ejército, el general Qasem Ata.
Las fuerzas gubernamentales detonaron durante el fin de semana explosivos en las carreteras que comunican con Tikrit. La aviación bombardeó las posiciones de los insurgentes, un día después de la llegada de las fuerzas terrestres, según testigos.
A pesar de los intensos combates, las fuerzas iraquíes se han mostrado incapaces de arrebatar al Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) el control de Tikrit, bajo su poder desde el pasado 11 de junio, durante un fiero enfrentamiento que ha dejado un elevado número de bajas en ambos bandos, indican testigos citados por la cadena británica BBC. “Hemos matado desde ayer [por el sábado] a más de 142 terroristas, 70 de ellos en Tikrit, y destruido decenas de vehículos en manos de los insurgentes”, afirmó este domingo el general Qasem Ata, quien no precisó el número de víctimas en sus filas. Entre los logros conseguidos, reivindicó la toma de la universidad de Tikrit.
Precisamente este domingo, el EIIL ha proclamado el Califato Islámico en las zonas que controla y ha nombrado califa a su líder, Abú Bakr al Baghdadi. La nueva organización se declara Estado independiente y reclama que todos los musulmanes del mundo le juren fidelidad.
Fuentes del Gobierno iraquí informaron de que Rusia envió el sábado al país árabe cinco aviones de combate Sukhoi, que estarán operativos en “tres o cuatro días”. El Ejecutivo de Nuri al Maliki había anunciado la semana pasada la adquisición de los cinco aparatos por 500 millones de dólares (más de 367 millones de euros), según informó la BBC. CNN indicó que el contrato firmado prevé la llegada de otros 20 aviones de guerra.
El general Qasem Ata también confirmó la colaboración de Estados Unidos para “estudiar los objetivos importantes”. No obstante, Washington, que desplegó hace días drones en Bagdad para proteger a su personal en la Embajada, aseguró este domingo que los 300 asesores militares enviados a Irak no están directamente implicados en la operación en Tikrit.
Sin embargo, también hubo críticas para EE UU. El viceprimer ministro para la Energía, Husein al Shahristani, uno de los políticos más veteranos de Irak, reprochó a Washington un retraso en la entrega de “armamento contratado”, aunque fuentes norteamericanas aseguran que “se ha hecho lo posible para garantizar que el país tenga armamento moderno”.
Mientras tanto, los múltiples llamamientos tanto dentro como fuera de Irak a la formación de un Gobierno de unidad parecen haber surtido efecto. El Parlamento se reunirá mañana, martes, para iniciar el proceso.