El presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden, nominó a la legisladora Deb Haaland para dirigir el Departamento del Interior. De ser confirmada por el Senado, Haaland se convertiría en la primera nativa americana en situarse al frente de este departamento e incluso en formar parte de un gabinete de Gobierno.
Según el diario The Washington Post, Haaland -que es miembro de la tribu Pueblo Laguna del estado de Nuevo México- ha prometido transformar este departamento en una institución que promueva la energía renovable y la mitigación de la crisis climática, en la línea marcada por Biden para su mandato venidero.
“Es necesario cambiar las prácticas de arrendamiento. Tenemos que asegurarnos de que estamos promoviendo y aumentando los arrendamientos de energía limpia”, dijo recientemente en una entrevista a Reuters. El Departamento del Interior controla más del 20% del territorio del país y en numerosas ocasiones ha chocado con los intereses de las 574 tribus reconocidas a nivel federal.
Pero Haaland también apoya la conservación del 30 % de las tierras federales para 2030 y la utilización de la Ley de Antigüedades para proteger las tierras sensibles desde el punto de vista cultural y ecológico, como los monumentos nacionales.
Optimismo por parte de los nativos americanos
El presidente del Congreso Nacional de Nativos Americanos se congratuló de la nominación de Haaland. “Es importante tener una perspectiva nativa americana de alto nivel sobre la mesa”, dijo en una entrevista.
“Haaland sería eficaz especialmente en lo que respecta al cambio climático, la protección de los lugares sagrados en las tierras tribales y la restauración de las tierras que han sido administrativamente arrebatadas a las tribus”, añadió.
Al hilo de este nombramiento, se ha conocido también que Biden nominará al afroamericano Michael Regan para hacerse cargo de la agencia medioambiental estadounidense, la EPA. Regan ya trabajó en este organismo durante las administraciones de Bill Clinton y George W. Bush. Ahora, tendrá la difícil tarea de revertir las políticas de retroceso ambiental promovidas por Trump.
Todas estas declaraciones y nombramientos chocan frontalmente con la política llevada a cabo por la anterior administración durante los últimos cuatro años. A la par, Biden conforma uno de los gabinetes presidenciales más diversos de la historia de Estados Unidos.