Bloqueos sindicales: dos plantas de SanCor que estaban casi paradas volvieron a funcionar

Dos establecimientos, ubicados en Gálvez y La Carlota, retomaron sus actividades.

La cooperativa SanCor logró reanudar sus operaciones en dos de sus plantas industriales, luego de meses de interrupciones generadas por un conflicto laboral que data del 17 de octubre pasado. Este lunes en la Secretaría de Trabajo habrá una audiencia entre las partes para tratar de llegar a un acuerdo que levante los bloqueos sindicales a la actividad de la empresa, luego de varios encuentros en el ex Ministerio de Trabajo que no dieron frutos. El cambio de Gobierno y una oferta salarial de la empresa hizo que empleados volvieran a trabajar normalmente pese a que el sindicato todavía no levantó las medidas de fuerza.

Las fábricas de SanCor que han reanudado sus operaciones son las ubicadas en Gálvez y La Carlota. Estas plantas industriales retomaron su actividad luego de un período de inactividad de dos meses, causado por bloqueos sindicales. La reactivación de estas instalaciones se produce en un contexto de negociaciones y propuestas salariales mejoradas por parte de SanCor, y en medio de un conflicto con la Asociación de Trabajadores de la Industria Láctea de la República Argentina (Atilra).

Mañana volverían al trabajo, además, las plantas de Devoto y Balnearia. La reanudación de las operaciones en estas plantas representa un paso importante para la cooperativa, en un esfuerzo por regularizar sus actividades industriales y comerciales.

El cambio de Gobierno fue clave para aceleración de los tiempos en el conflicto entre Atilra y SanCor. El Ministerio de Trabajo se había negado a dictar la conciliación obligatoria desde que la disputa estaló en octubre pasado. Eso podría cambiar hoy mismo, cuando las partes se vuelvan a ver la cara en la cartera que ahora se transformó en Secretaría.

El conflicto se desató en octubre pasado por desacuerdos salariales, pero coincidió además con la caída del proyecto de crear un fideicomiso con fondos públicos y aportes privados para el rescate de empresa láctea. El proyecto estipulaba un rol prácticamente dirigencial para el sindicato, lo que ilusionaba a los dirigentes gremiales.

La semana pasada, según una comunicación interna que recibieron los empleados y a la que tuvo acceso este medio, la empresa reveló las más recientes ofertas salariales que había presentado. La recomposición salarial, ante la disparada de los precios de los últimos meses y la aceleración de diciembre, convenció a una parte importante de los empleados de volver al trabajo.

El cierre en noviembre de una de las plantas de SanCor, la productora de quesos ubicada en San Guillermo, Santa Fe, frenada por las protestas sindicales también afectó la decisión de varios de los empleados de reincorporarse en las labores cotidianas.

El conflicto es el mismo que a fines de octubre hico que SanCor tuviera que descartar más de 100.000 litros de leche ante la imposibilidad de procesarla, con las fábricas cerradas.

Desde el 17 de octubre, asambleas que ocupan la mitad de las horas de cada turno, detienen casi a cero la producción en las plantas industriales de la cooperativa.

Verónica Razzini, diputada nacional por el PRO y líder del Movimiento Empresarial Anti Bloqueos (MEAB) celebró el retorno a la producción en su cuenta de Twitter.

“Con esta noticia comenzamos a dar batalla contra la mafia sindical desde el empresariado y desde el Gobierno Nacional”, dijo la empresaria que denunció haber sido amenazada y baleada durante un conflicto sindical.

“Empieza la Argentina que deja definitivamente atrás las extorsiones que no nos dejan avanzar”, se sumó Patricia Bullrich, ministra de Seguridad.