Buenos Aires quiere imitar a San Francisco

En el distrito californiano, las políticas de reciclado comenzaron en 1989 y en 25 años lograron bajar 80% la cantidad de desechos enviados a rellenos sanitarios; tienen tres contenedores distintos.

basuraEsta ciudad de la costa oeste norteamericana, donde viven 800.000 personas y otras tantas llegan a trabajar todos los días, es el espejo en el que se quiere mirar Buenos Aires en materia de recolección y reciclaje de residuos, para encontrar una solución al colapso de los rellenos sanitarios.

Aquí todo el mundo, sin hacer diferencias entre adultos, jóvenes, adolescentes y niños, sabe que en el momento de tirar la basura debe hacerlo, según el tipo de residuo, en alguno de los tres contenedores de 120 litros dispuestos en casas, escuelas, oficinas, clubes, bares, restaurantes y paseos de compras.

Si el desperdicio por desechar es algún resto de comida, debe ser arrojado en el contenedor verde, que terminará en una planta donde se produce compost, producto vendido para fertilizar las tierras trabajadas por los elaboradores de vino.

Otro contenedor, el azul, es donde se debe depositar todo el material que puede ser reciclado: papel, cartón, botellas de plástico y vidrio. Por último, queda la basura que termina en los rellenos sanitarios y a la que aún no han podido encontrar una manera de recuperar. Ese material termina en un contenedor negro.

Los contenedores son luego levantados y vaciados por la empresa Recology, una vez por semana. Por este servicio, los vecinos deben pagar 30 dólares mensuales.

En promedio, por día, en esta ciudad del estado de California se generan 5479 toneladas de residuos, sólo un poco menos que en Buenos Aires: se recuperan 4384 toneladas y otras 1096 se entierran.

“San Francisco es el modelo ideal. Nosotros estamos en un estadio muy anterior. Buenos Aires necesita un proceso de discusión para que se pueda hablar de este tema. Lo importante es buscar el rumbo adecuado e ir paso a paso”, explicó a LA NACION el ministro de Ambiente y Espacio Público porteño, Edgardo Cenzón.

El funcionario visitó la ciudad californiana junto con un grupo de colaboradores y con los legisladores María Eugenia Estenssoro (UNEN), Gabriel Fuks (Frente para la Victoria), Pablo Bergel (Bloque Verde Alameda), Gabriela Seijo (Pro), Agustín Forchieri (Pro) y Cristian Ritondo (Pro).

UN HISTORIA DE 25 AÑOS

La idea fue conocer el trabajo y el proyecto que, desde hace 25 años, se desarrollan en esta ciudad, donde se recicla y se recupera el 80% de los residuos. El objetivo que tiene el gobierno de San Francisco es cumplir la meta de basura cero en 2020.

Los logros en materia de recolección de residuos de esta ciudad son un ejemplo para varias metrópolis del mundo, cuyas autoridades visitan estas tierras para conocer cómo consiguió San Francisco llegar a niveles tan altos de reciclaje.

Durante su viaje, Cenzón y los legisladores comprobaron que en San Francisco los avances se consiguieron mediante una política sostenida en el tiempo. En 1989 se aprobó una ley con “metas de reducción progresiva”.

El primer objetivo fue fijado para 1995, para conseguir reducir entonces un 25% la cantidad de residuos enviados a rellenos. El siguiente paso fue para 2000, y la meta fue lograr disminuir un 50% la basura enterrada.

Con los dos primeros pasos cumplidos exitosamente en 2002, en San Francisco determinaron nuevos objetivos a futuro. Con la iniciativa de Basura Cero consiguieron hacia 2010 recuperar y reciclar el 75% de los residuos. La meta final está puesta en el cambio de década: para 2020, esperan reducir el 100 por ciento de los residuos que en 1989 terminaban enterrados.

Buenos Aires quiere aprender de San Francisco. Cenzón sostuvo que no hay otra alternativa, porque el relleno sanitario de la Ceamse en José León Suárez, partido de San Martín, está saturado.

El primer paso, sostienen en el Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño, ya está dado: en un año y medio la Capital redujo un 43% la cantidad de basura que termina en el relleno sanitario. Pero saben que todavía falta mucho más.

EN OCTUBRE, EL NUEVO CONTRATO

En julio debería comenzar a regir en la Capital el nuevo contrato por la recolección de residuos, que les exige a las empresas que ganaron la licitación la renovación de la flota, con 176 nuevos camiones, y la colocación de 23.500 contenedores y 52.000 cestos, entre otras obligaciones. Pero el plan arrancaría desde octubre próximo.

EL MODELO DE CALIFORNIA

La separación de los residuos en San Francisco comienza con la educación escolar

3 contenedores

Los vecinos de San Francisco tiran los restos de comidas en un contenedor verde; el material reciclable, en uno azul, y el material irrecuperable, en uno negro

80% de reciclado

De las 5479 toneladas diarias de basura que genera San Francisco, se recuperan unas 4384 toneladas. Y 1095 toneladas se envían a los rellenos sanitarios

42% de reciclado

Es el promedio que tiene la ciudad de Buenos Aires, que genera unas 6000 toneladas diarias. Aunque unas 3500 toneladas terminan en los rellenos de la Ceamse