Desafiaron las órdenes de mantener el aislamiento social y salieron de sus casas para refrescarse del calor de la primavera.
A pesar de que las principales playas de Los Ángeles permanecen cerradas al público, como Malibú, Santa Mónica o Venecia, hay otras del estado de California como las de Huntington Beach y Newport Beach que durante el fin de semana registraron una gran afluencia de gente, que salió de su hogar y desafió a la cuarentena por la pandemia de coronavirus.
Las altas temperaturas en la región, que en los últimos días superaron los 30 grados, llevaron a miles de visitantes a la playa. Según informaron las autoridades de Newport Beach, ciudad perteneciente al condado de Orange, este sábado hubo más de 40.000 personas en los arenales y se espera que este domingo se vuelva a repetir la escena.
Las personas que acudieron a la playa no sólo se rompieron la cuarentena, sino que también incumplieron con las medidas sanitarias: no portaron mascarillas ni respetaron la distancia de seguridad en la playa. Las fotos los muestran cerca, juntos, con poca ropa para tomar sol y broncearse, o con trajes de neoprene para surfear.
“Esto es más seguro que ir de compras”, dijo Mckenzie Scharf junto a su hijo de cinco años, que jugaba con un barrilete. “¿Cuánto tiempo se supone que debemos estar prisioneros?”, agregó.
Las autoridades de Newport Beach, informaron que muchos de los visitantes de la playa pertenecían a los condados de Los Ángeles o San Diego. Y aseguraron que comenzarán a vigilar los accesos a la playa y, si no se cumplen las medidas, se decidirá el cierre.
Como contrapartida, el viernes, el gobernador del estado decretó la reapertura de varios comercios, que incluyen salones de belleza, tiendas de tatuajes y salas de bowling. Según argumentó, las medidas fueron tomadas en línea con lo dicho por el presidente Donald Trump, que entiende que no es momento de cerrar el país sino de activar la economía. El lunes abrirán restaurantes y teatros.