“La vida nos obliga a tomas estas medidas”, dicen los vecinos de un barrio de Tucumán.
Cansados de los reiterados episodios de inseguridad, un grupo de vecinos de un barrio de Tucumán conformaron una milicia urbana para frenar a los delincuentes.
“Nadie quiere salir a la calle a arriesgar la vida; la realidad nos obliga a tomar estas medidas”, cuenta a La Gaceta Luis, uno de vecinos del barrio Diza.
“Nunca nos van a entender a nosotros, porque ellos (los gobernantes) no viven aquí. Obviamente que uno quisiera estar tranquilo en casa, no tener que salir a montar guardias, pero la realidad nos obliga”, agrega.
“Es un grupo de padres, tíos y abuelos que se cansó de que los delincuentes vengan y ataquen a los más chicos. Les ponen una pistola en la cabeza para sacarles una bicicleta. Asaltan a sus hijas, a sus hermanas y a sus señoras. La gente está cansada”, describió Gustavo Parra, un comerciante.
El grupo al que se refiere se armó, se dividió en turnos y salió a patrullar las calles. Usan pistolas, revólveres, escopetas, machetes, látigos, y cachiporras.
“Surgió por dos motivos. Primero porque muchos aquí conocíamos a don (Juan Pedro) González, el hombre que fue asesinado por dos motochorros el fin de semana (se informa por separado)”, indicó.
Y, agregó: “Segundo, porque los delincuentes tienen ensañamiento con este barrio: aquí la gente ya no sale a la calle porque sabe que la asaltan; ya convivíamos con ese peligro, pero ahora, al no encontrar gente en las calles, los ladrones se meten a las casas”.