El abogado habló en la 99.9 sobre el caso sucedido en Florencio Varela y donde avanzaron para tratar de establecer las vinculaciones con comisarios de la Policía Bonaerense que incluso están detenidos, aunque primero tuvieron que lidiar con la complicidad judicial.
El caso del crimen de Lautaro Morello y la desaparición de Lucas Escalante, tiene aristas muy inquietantes. Luego de diversos allanamientos en el avance de la investigación, se pudieron encontrar indicios sobre el encubrimiento de la policía y el accionar de la propia justicia para entorpecer los avances sobre el principal acusado, el comisario mayor de la Policía Bonaerense Francisco Centurión.
El abogado Carlos Dieguez habló en la 99.9 en representación de una de las familias que buscan justicia para sus hijos, uno asesinado y calcinado, el otro cuyo paradero aún se desconoce: “la primera fiscalía que tomó intervención, la número 2 de Florencio Varela, prácticamente trabajó para estos acusados. Se encargaron de retrasar el procedimiento, suspendieron un allanamiento sin autorización de nadie, entregarle la llave al sospechado, hoy detenido Comisario Mayor Francisco Centurión. Le dieron mucha ventaja para acomodar la escena del crimen, ocultar pruebas más allá de lo que se ocultó al inicio”.
No es el único que está acusado en esta causa, sino que también aclaró el abogado que “el otro Comisario Inspector detenido, de apellido Argañaraz, estuvo 72 horas para comunicar la denuncia bajo el argumento que le decía a las dos familias que los chicos iban a aparecer y que andaban de joda”.
Cuando hicieron un allanamiento en la casaquinta del Comisario Mayor Centurión encontraron elementos que parecían ser claves para la investigación: “en el marco de la detención se secuestraron tres cajas fuertes de grandes dimensiones y de última generación. Dos de ellas tenían doble combinación y otra triple combinación. Se tuvo que hacer una apertura forzada y se secuestró en una de ellas un listado de dinero, anotaciones donde decía 5 mil dólares, 15 mil pesos y demás. Eso indica que era un dinero que entraría de alguna manera”.
Toda la familia de Centurión parecía tener cuestiones que ocultar, además de que también pertenecen a la fuerza: “lo mismo hicieron con la hija que es directora de personal de la UTOI de Florencio Varela. Cuando le fueron a retener el teléfono, un jefe policial la sacó por un portón trasero ocultándola y le dijo a la Policía Federal que no se encontraba”.
Las autoridades de Seguridad de la provincia encabezadas por Sergio Berni nunca se contractó con las familias pero saben que eso no sucedería y están abocados a tratar de llegar al fondo de la situación: “nadie se interesó, nadie se comunicó con la familia de la víctima a la que represento. Todos los elementos secuestrados el día de la detención, pudieron ser periciados y se abrieron todos los teléfonos. El viernes tendremos los resultado de fotos, chats y videos. Además se les secuestraron dos teléfonos celulares truchos donde tenían los email limados, los chips no se podían identificar de que empresa servidora era. También el mismo día, se allanó la Unidad 35 de Magdalena y se le incautaron los celulares a Cristian y Maximiliano Centurión que venían utilizando desde el 17 de diciembre pasado”.
Una etapa está finalizada en la investigación para el abogado, pero saben que la historia no terminará allí: “creemos que es una banda mixta. El personal policial está todo detenido y ahora comienza la otra etapa”.