India y el África Subsahariana son las regiones donde más recién nacidos murieron en 2019 antes de cumplir un año a causa, principalmente, del uso de combustibles de mala calidad para las cocinas de los hogares, dice un informe de la ONG State of Global Air 2020 publicado en Estados Unidos.
En el 75% de los casos, el humo tóxico de los combustibles usados para cocinar en los hogares es el responsable de la muerte de los recién nacidos.
Si bien la dependencia de los hogares a combustibles de mala calidad se reduce de manera lenta y constante, ésta sigue siendo la principal causa de la muerte de los bebés.
En 2019, 476.000 murieron antes de cumplir un año. Entre ellos, cerca de cien mil bebés indios y un poco más de doscientos mil bebés africanos subsaharianos.
Según la organización State of Global Air, autora del estudio, hay cada vez más pruebas que permiten vincular la exposición de las madres a la contaminación durante el embarazo con el riesgo creciente de que los bebés nazcan prematuramente o con un grave déficit de peso.
Los autores señalan también que la pandemia ha tenido un impacto positivo en términos de contaminación. Muchos países han recuperado los cielos azueles y las noches estrelladas por primera vez en muchos años. Estos puntos positivos, sin embargo, no durarán mucho tiempo, afirman también los autores.