El testigo que denunció la desaparición forzada del tatuador está en la mira de la Justicia. La familia exigió seguir investigando cómo murió Santiago.
“A Santiago Maldonado se lo llevó Gendarmería”. Eso es lo que declaró Matías Santana, primero bajo identidad reservada ante la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) y luego a cara descubierta ante el juez federal Guido Otranto. “Vi como lo golpearon. Tenía puesta la campera celeste que le presté. Lo metieron en una camioneta que salió rumbo a Esquel”, repitió ante los medios. Ahora, con la confirmación de que el tatuador murió por “asfixia por sumersión”, el testigo clave en la hipótesis de la desaparición forzada quedó en el ojo de la tormenta.
Santana será indagado en los primeros días de diciembre por resistencia a la autoridad y agresiones, según pudo saber TN.com.ar. El juez que le tomará la declaración será ni más ni menos que Otranto, apartado de la causa principal por “temor de parcialidad”, pero quien instruye en esta denuncia.
Gendarmería acusó a Santana de lastimar con un piedrazo a Emmanuel Echazú. Este subalférez es, a su vez, el único imputado por la muerte de Santiago en el contexto del operativo de la fuerza que reprimió a la comunidad mapuche en el Pu Lof en Resistencia de Cushamen.
Los investigadores aún no determinaron si el oficial fue herido en la Ruta Nacional 40 -como declaró- o en el río Chubut -donde apareció el cuerpo de Maldonado-. La fuerza presentó varias pruebas: la testimonial de Santana en la que reconoció haber participado del piquete, la filmación de la represión, el acta oficial del operativo y el estudio médico sobre la lesión en la cara de Echazú.
No es el único problema que Santana deberá enfrentar en el juzgado federal de Esquel. Una alta fuente de Gendarmería adelantó a TN.com.ar que, una vez oficializado el resultado de la autopsia, también lo denunciará por falso testimonio.
El mapuche juró que, montado sobre un caballo, con binoculares que luego perdió y a 300 metros de distancia, vio como gendarmes detuvieron al tatuador, lo golpearon y lo metieron en una camioneta. A Otranto lo apartaron por, entre otras cosas, hacer pública su desconfianza en ese testimonio.
El juez federal también consideró en la entrevista del 17 de septiembre en La Nación que “la hipótesis más razonable es que Santiago se haya ahogado”. La Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia lo excluyó de la investigación por “temor de parcialidad”.
Ahora, 115 días después de la denuncia por desaparición forzada, el juez federal Gustavo Lleral informó que Santiago “falleció por ahogamiento, sumergido en las aguas del río Chubut, coadyuvado por hipotermia”.
Sergio Maldonado aceptó el resultado de la autopsia realizada sobre el cuerpo de su hermano, pero le solicitó al juez continuar con la investigación: “Aún desconocemos la verdad sobre cuándo, dónde y cómo murió Santiago”.