El periodista y escritor brindó detalles en la 99.9 de su nuevo libro “Masacre en el Comedor” donde cuenta como se desarrolló el “atentado más sangriento de los 70´s” donde Montoneros puso una bomba vietnamita en el Comedor de la Policía Federal.
El trabajo de documentar el pasado para traerlo constantemente al presente, es una tarea que el periodista y escritor Ceferino Reato realiza habitualmente. Con su último libro, “Masacre en el Comedor” se propuso contar una historia prácticamente olvidada de los años de dictadura militar que fue el ataque con una bomba de Montoneros al Comedor de la Policía Federal el 2 de julio de 1976.
En declaraciones a la 99.9, Reato lo definió como “el atentado más sangriento de los 70´s”. Además agregó que “la historia va hasta el 94, hasta la voladura de la AMIA. Provocó 23 muertos y 110 heridos. Es un hecho que, como ocurrió durante el Gobierno Militar, fue tomado por la gente como un acto terrorista y nadie escribió sobre ello, estaba en una nebulosa.”
Cuando decidió empezar a investigar, tuvo que sortear muchos obstáculos: “la justicia nunca lo investigó ni durante la dictadura ni en democracia y había pocos papeles. Tuve que rastrear bastante pero quedé satisfecho porque me permitió exhibir bastante bien como funcionaba el servicio de inteligencia e información de Montoneros”.
En ese sistema de inteligencia es donde aparece la figura de Rodolfo Walsh sobre el que también hizo una descripción: “Walsh era un periodista y escritor famoso en los 70´s. Había dejado para ese entonces la literatura y era un revolucionario a tiempo completo, era la persona clave de los servicios de información y participó de las operaciones más importantes de Montoneros. En este caso, tenía muchas funciones como persona clave de inteligencia, una era coordinar a los infiltrados en la policía y las fuerzas armadas”.
Fue justamente Walsh quien llegó a infiltrar a José María Salgado que dejó la bomba en el comedor de la Policía Federal: “logró infiltrar a un chico de unos 21 años que estaba haciendo la conscripción y se quedó como agente y fue quien llevó la bomba simulando ir a almorzar; pero se retiró 7 minutos antes de que explote. Era una bomba vietnamita con postas de acero que agujerean todo lo que encuentran. Walsh fue un personaje clave”.
Establecer estas cuestiones con claridad para el periodista es clave porque nunca se abunda en esos años de relación directa entre Montoneros y Rodolfo Walsh: “hay un relato oficial y la justicia depende del gobierno de turno. Está instalado el relato de los jóvenes idealistas o militantes que no cometían hechos de sangre y es difícil ir contra eso. Las Universidades son un ejemplo, en las carreras de periodismo Walsh es un santón pero hay que decir todo porque siempre estamos con la ridiculez de tener media docena de biografías de Walsh y todos eluden sus años Montoneros o los tratan muy por arriba”.