El Ministerio ha publicado una serie de nuevas directrices que forman parte de la política de “doble reducción” lanzada en julio por el Ejecutivo chino.
El Ministerio de Educación de China ha anunciado este lunes que prohíbe que se someta a exámenes por escrito a los alumnos de seis y siete años para reducir la presión académica a la que se enfrentan los estudiantes.
El Ministerio ha publicado una serie de nuevas directrices que forman parte de la política de “doble reducción” lanzada en julio por el Ejecutivo chino, la cual se refiere a la rebaja de las tareas a las que tiene enfrentarse el alumno tanto en su escolarización obligatoria como en las actividades extraescolares.
Para lograr una distribución de los alumnos “más equilibrada”, las escuelas tampoco podrán destacar a ningún grupo escolar como “grupo excelente” por su rendimiento académico, práctica común en las escuelas públicas chinas.
También ha hecho un llamamiento a las escuelas para que implementen el plan de enseñanza y no lo alteren sobre la marcha, y prohibió que los alumnos corrijan sus propios deberes. Para reducir la competencia entre los estudiantes, las instituciones educativas no podrán cambiar a los alumnos de grupo o de asiento en función de sus notas.
Educación mencionó algunos de los problemas a los que se enfrentan en la actualidad los estudiantes chinos: el 67% de ellos no duermen lo suficiente y el 22% está en escuelas que no cumplen con los requisitos de horas mínimas de educación física.
El Gobierno chino ha impulsado en las últimas semanas importantes reformas educativas como la incorporación del pensamiento político del líder del Partido Comunista de China (PCCh) y del país, Xi Jinping, a los planes de estudio de escuelas y universidades o regulaciones restrictivas para el sector de la educación privada.
Sobre este último punto, Pekín anunció en julio la prohibición de que los centros de formación extraescolar consiguieran beneficios económicos impartiendo clases sobre asignaturas consideradas como troncales en China, y tampoco podrán dar clases en días festivos o fines de semana.
Dicha decisión provocó caídas en bolsa de empresas del sector educativo chino como TAL Education o Gaotu, las cuales cotizan en la Bolsa de Nueva York.