El material, esperan, podrá ser utilizado para fabricar robots biomiméticos.
Un grupo de científicos chinos logró crear un metal que se comporta de forma similar al del T-1000, el temible robot asesino interpretado por Robert Patrick en Terminator.
El material, por supuesto, está lejos de tener la compleja maquinaria que requiere un robot como el de la película protagonizada por Arnold Schwarzenegger, pero puede ser manipulado con imanes y utilizarse para completar circuitos. Sus desarrolladores, incluso, apuestan a que algún día puedan crearse robots similares a los organismos vivos.
La Sociedad Americana de Química publicó un video sobre el metal en acción, además de un artículo titulado Magnetic Liquid Metals Manipulated in the Three-Dimensional Free Space (Metales Líquidos Magnéticos Manipulados en el Espacio Tridimensional). El proyecto fue llevado adelante por científicos de la Universidad de Beihang en China.
Los investigadores añadieron partículas de hierro a una gota de galio, indio y aleación de estaño sumergida en ácido clorhídrico, indica el informe.
“Una capa de óxido de galio se formó en la superficie de la gota, lo que redujo la tensión superficial del metal líquido”, detalla el texto, añadiendo que esto es lo que le permite estirarse y moverse sin romperse.
“El material estirado verticalmente puede moverse horizontalmente con medio cuerpo en la solución y la otra mitad en el aire, lo que se asemeja a la naturaleza de un anfibio que camina erguido”, explica el estudio.
Por sus atractivas propiedades, este material presenta una plataforma “fundamental y prometedora” para que los metales líquidos desarrollen aún más la actuación multifuncional en el espacio libre y, finalmente, conduzcan “a los robots blandos inteligentes y biomiméticos reconfigurables dinámicamente en el futuro”.