El economista habló en la 99.9 sobre la importancia de volcar ciertos conceptos teniendo en cuenta que la mitad del país no ha vivido procesos de inflación en el país.
Los tiempos de inflación son difíciles en muchos sentidos. Más aún cuando es la primera vez para muchos argentinos que atraviesan un período de estas características. El economista Claudio Zuchovicki hizo hincapié en la 99.9 sobre la importancia de que, aquellos adultos que ya pasaron por situaciones de este tipo, vuelquen lo que han aprendido a los más jóvenes.
“Queremos empezar a discutir el futuro, que actitudes puedo tener hoy si quiero cambiar el futuro desde el punto de vista financiero. Es muy importante la educación financiera y la administración de los costos de hoy. Muchas personas no vivieron aún sin inflación y no saben como se mueven las cosas en ese contexto”, dijo primeramente.
Lo que está pasando en estos momentos, también es algo común y que no debería ser motivo de preocupación inminente: “para vencer a la inflación, es algo de libro, recontra comprobado, un efecto colateral es la recesión. La forma en la que se encara generalmente es subir la tasa de interés, dejar de emitir y cortar el déficit fiscal y el gasto público. Eso es más recesivo para la economía y los precios no bajan porque nos ponemos todos de acuerdo, sino porque como no vendo, me tengo que esmerar para vender. Esa es la discusión ahora”.
Ahí es donde aparece un fenómeno distinto que también describió el especialista: “hay un término que se utiliza mucho ahora y es la reduflación, que es el primer impacto que vemos. Es reducir lo que te ofrezco, sin modificarte el precio. Después hay que competir por servicio y es un efecto colateral que puede traer buenas consecuencias. No estamos discutiendo hiper inflación, ni cuando explota todo, sino cuando salimos de la recesión”, dijo mirando el aspecto más positivo de la situación.
De todas maneras, Zuchovicki advirtió que en términos inflacionarios, sigue siendo una cifra elevada: “la inflación sigue siendo alta porque 8.8 no es para festejar, pero empezaste a equilibrar los precios relativos. Pasaron 5 meses y no puedo pedirle que acomode todo en ese tiempo. Si estoy gordo no es por lo que comí anoche, sino que es un desajuste de mucho tiempo que me lleva tiempo volver a acomodarlo”, ejemplificó.