Un nuevo sistema permite que una computadora reconozca el estado de ánimo de quien la utiliza. Además, otros software pueden reconocer la verdad y la mentira, los rasgos y gestos faciales.
El sistema fue creado por investigadores del Grupo de Inteligencia Artificial Aplicada de la UC3M y del Grupo de Sistemas de Diálogo Hablado y Multimodal de la UGR, de las universidades españolas Carlos III de Madrid y Granada. El mismo puede emplearse para que las computadoras detecten el estado de ánimo de quien las está usando y puedan darles una respuesta adecuada.
David Griol, profesor del Departamento de Informática de la UC3M, explicó que, “gracias a este avance, la máquina podrá determinar cómo se siente el usuario (emoción) y cómo pretende continuar con el diálogo (intención)”. Los científicos se han basado en las emociones negativas que pueden hacer que una persona se frustre al hablar con un sistema automático, como el enfado, el aburrimiento y la duda. “Para detectarlas automáticamente, se utiliza información sobre el tono de voz, la velocidad con la que se habla, la duración de las pausas o la energía de la señal de voz. Hay un total de 60 parámetros acústicos distintos”, comentó uno de los creadores.
“Que el sistema no haya reconocido bien varias veces lo que su interlocutor desea decirle, o le haya pedido que repita información que ya le había proporcionado, pueden ser factores que hagan que la persona se enfade o se aburra al interactuar con el sistema”, aclararon los investigadores de la UC3M y la UGR. También es importante que la máquina pueda prever cómo seguirá el dialogo con su usuario, “para ello, hemos desarrollado un método estadístico que aprende de diálogos previos cuáles son las acciones más probables que puede tomar un usuario en cada momento”.
Cuando se han detectado tanto la emoción como la intención, los científicos proponen adaptar automáticamente el diálogo a la situación que atraviesa el usuario. “Por ejemplo, si tiene dudas, se le puede dar una ayuda más detallada; si se aburre, esto puede ser contraproducente”.
Por su parte, investigadores de la Universidad de Columbia en EE.UU. han creado herramientas informáticas que analizan la entonación, el acento, la forma de expresarse y otros elementos paraverbales que pueden detectar el engaño en cualquier comunicación, identificando las falsedades de modo más fiable que el polígrafo o la intuición humana.
Otra herramienta informática novedosa surge del trabajo de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). Se trata de una máquina que ayuda a las computadoras a determinar si una cara es atractiva, tacaña o amenazadora; en algunos casos, con una precisión que supera el 90 por ciento. “Las características del rostro juegan un papel clave en nuestros juicios diarios sobre otras personas y la percepción de dominancia es una parte importante de los roles sociales”, explicaron los especialistas.