Conflicto en una localidad mauritana al intentar enterrar a un cristiano en un cementerio musulmán

Hace dos años, fueron detenidos los miembros de una «célula» que se dedicaban a bautizar a los ciudadanos que se convertían.

El intento de enterrar a un cristiano en un cementerio musulmán de una localidad mauritana ha provocado un serio conflicto, con intervención de los imanes locales que argumentaban que el cristiano no se había “arrepentido” (renuncia a su religión).

El debate sobre el asunto de la evangelización en la ciudad de Sélibaby, capital de la región de Guidimagha, ha vuelto a cobrar protagonismo tras el revuelo provocado por el entierro de un cristiano.

El sitio web «Guidimagha News» informó de que el fallecido, que trabajaba como peluquero, murió en un accidente en la carretera a Nouakchott. Su cuerpo fue trasladado a Sélibaby para su entierro.

Sin embargo, cuando llegó el cuerpo, los presentes se sorprendieron al saber que era cristiano y que debía ser enterrado según los ritos de esta religión, “lo que provocó un gran descontento”. Algunos imanes pidieron que el difunto no fuera enterrado en cementerios musulmanes ya que “no había proclamado su arrepentimiento”.

Hace dos años, se descubrió en la ciudad una célula evangelística, integrada por miembros de diversos orígenes, que realizaban ceremonias de bautismo para los nuevos conversos. Las investigaciones realizadas en el momento dieron como resultado la detención de los implicados, quienes posteriormente fueron puestos en libertad.