Conseguir remedios, la otra lucha de 600 pacientes con cáncer

Deberían entregarse gratis a través del Banco de Drogas Oncológicas. El Gobierno culpa al anterior y promete soluciones.

wp-1472395340982.jpegPor ley, el Estado argentino debe garantizar el acceso al tratamiento a los pacientes con cáncer que no cuenten con obra social o prepaga. Pero la norma no se está cumpliendo para todos. Según admitió a Clarín el Ministerio de Salud de la Nación, hay 600 enfermos sin cobertura médica que enfrentan problemas para recibir la medicación. El Banco Nacional de Drogas Oncológicas no se las entrega, y los enfermos se ven obligados a peregrinar por otras oficinas públicas en Capital o en provincia de Buenos Aires para recibir sus tratamientos. Una demora que se convierte en un calvario y pone en riesgo sus vidas.
“El padrón del Banco Nacional de Drogas Oncológicas registra a 10.606 pacientes este año. Dentro de ese total, 600 enfermos tienen problemas para recibir los medicamentos”, reconoció a Clarín Néstor Pérez Baliño, secretario de promoción, programas Sanitarios y salud comunitaria del Ministerio. En algunos casos, los enfermos que no consiguen los medicamentos en el Banco son derivados al Ministerio de Desarrollo Social de Nación. Pero como algunos medicamentos son de alto costo, el trámite lleva más de un mes. Esto hace que los pacientes tengan que suspender el tratamiento por un tiempo. El viernes, el Ministerio de Desarrollo Social, a cargo de Carolina Stanley, exhibía en planta baja un cartel en el que advertía a los visitantes que tenía en falta a los medicamentos “vincristina, mesna, mercaptopurina, y ciclofosfamida 50”.
Al no recibir los medicamentos, otros enfermos acuden a la cartera de salud bonaerense, o a veces los hospitales públicos aún almacenan algunos medicamentos. Incluso, según pudo comprobar Clarín al pasar una mañana en la sede del Banco Nacional de Drogas Oncológicas, hay casos de pacientes que se intercambian entre sí dosis de fármacos que les sobraron a otros. La situación de la falta de medicamentos en tiempo y forma les resulta desesperante, y confiesan que se sienten “abandonados”
La causa del problema tiene diferentes versiones. Pérez Baliño, que asumió en diciembre pasado con la gestión del Ministro Jorge Lemus, tras el recambio de Gobierno, argumentó: “La gestión anterior empezó a hacer una licitación en febrero del año pasado. Cuando llegamos, el expediente no se había solucionado. Por lo cual, la compra de medicamentos oncológicos no se hizo. En mayo pasado, realizamos compras directas de tratamientos. En marzo, también habíamos hecho una licitación que fue impugnada por un laboratorio farmacéutico. Y esto demoró aún más las compras. Con un compra directa y una licitación en curso, esperamos tener al menos ordenada la provisión de medicamentos más urgentes para setiembre”.
En cambio, Daniel Gollán, que fue Ministro de Salud durante el último año de la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, contó otra versión a Clarín: “Durante 2015, se hicieron dos llamados a licitaciones. En la segunda, se presentaron ofertas con precios desorbitantes. Mientras se discutían los precios (y finalmente se logró que se bajaran), se hicieron compras de urgencia. En diciembre, la segunda licitación seguía su curso normal, y el Banco Nacional de Drogas Oncológicas estaba abastecido”. Gollán, que ahora integra el Observatorio de la Fundación Soberanía Sanitaria, denunció que “recientemente hubo hospitales que alertaron que faltaban medicamentos”.
El faltante de medicamentos vulnera el derecho humano a la salud e implica riesgos para la sobrevida de los pacientes. De acuerdo con Gustavo López, jefe del servicio de oncología del Hospital Bernardo Houssay de Vicente López y vocero de la Asociación Argentina de Oncología Clínica, “es preocupante que los pacientes con cáncer no reciban los tratamientos porque el desenlace de la enfermedad puede ser diferente. Las drogas son más efectivas cuando los pacientes están en los primeros estadios de la enfermedad o cuando se encuentran en cuadros sin deterioro en estadios avanzados. Por lo cual, si no acceden a tiempo a los tratamientos, el control de la enfermedad se dificultará”.