La Suprema Corte Bonaerense anuló la condena de los exjueces Horacio Piombo y Benjamín Sal Llargués que beneficiaba a un violador, calificó de “arbitrario e irrazonable” el fallo, y además, solicitó reimplantar la pena al acusado de abusar sexualmente de un niño de seis años.
La pena había sido reducida por los dos jueces del Tribunal de Casación provincial por considerar que el nene “tenía una orientación sexual homosexual”.
En el fallo de los jueces Luis Genoud, Hilda Kogan y Héctor Negri, calificaron el hecho como constitutivo del delito de “abuso sexual gravemente ultrajante” y además pidieron “restablecer la agravante del aprovechamiento de la situación de indefensión del menor”, y “reimplantar la pena de seis años de prisión, accesorias legales y costas impuesta por el tribunal de juicio”.
Así, los jueces de la Corte modificaron la decisión que habían tomado Sal Llargués y Piombo y que había generado una gran polémica que terminó con la renuncia de ambos magistrados. Los exjueces que integraban la Cámara de Casación Penal bonaerense habían reducido la pena al condenado.