El concejal del Frente Renovador, Cristian Azcona, se refirió en la 99.9 a la aprobación del aumento de tasas y criticó al intendente Carlos Arroyo: “no se escuchó a la oposición y se aumentó la tasa, contradiciendo lo que se había indicado en esa campaña”, indicó.
El aumento de tasas que se dio ayer en el Concejo Deliberante, generó la reacción inmediata del concejal Cristian Azcona quien a través de la 99.9 indicó que todo lo sucedido se contra pone con lo que el intendente Carlos Fernando Arroyo había expresado en campaña.
“Me opuse al aumento por entender que es desmedido y desproporcionado para algunos sectores de la ciudad”, remarcó además. Luego abundó: “se hizo referencia a algunos inmuebles que aumentarán un 649% y se refirió a algunos sectores de Playa Grande y Los Troncos. En líneas generales, se manifestó también que la ciudad tendría un incremento importante en la TSU, un 41% aproximado”.
El tratamiento de esta normativa generalmente se realiza en el cierre del año, pero esta vez hubo un atraso y además, acuerdos políticos, algo a lo que también se refirió Azcona: “la ordenanza fiscal impositiva se trata habitualmente en diciembre y vino con un mes de retraso. Llamativamente, las modificaciones llegaron a las 11 de la mañana y a las 13 ya estábamos tratando de votar, con una decisión ya tomada. No es algo que nos tiene que poner colorados, es parte de la democracia, pero es un camino distinto a lo que había elegido el intendente cuando era concejal e incluso cuando estaba en campaña”. Lejos de esa postura, indicó que “no se escuchó a la oposición y se aumentó la tasa, contradiciendo lo que se había indicado en esa campaña”.
Más allá de los aumentos, está claro que de lo recaudado, una gran mayoría irá a parar al pago de sueldos de los empleados municipales. “Casi el 65% de los impuestos irán a parar al pago de sueldos. Hay un esfuerzo muy grande de los marplatenses y batanenses porque el nivel de cobro el alto”, indicó.
Como pasa habitualmente, las promesas de campaña de cualquier político, distan de lo que luego puede hacer en el ejercicio del poder: “el intendente municipal cuando asumió dijo que no entraría nadie a trabajar, pero desde diciembre a junio entraron 500 personas. Esa es la matriz que tenemos que discutir, si el rol del estado es brindar servicios, recaudar o qué”.
De todas maneras, aseguró que no ve mala intención en las decisiones de Arroyo: “creo firmemente que el intendente es una buena persona y honesta, pero eso no alcanza para conformar una visión estratégica de la ciudad”, advirtió.