Un tribunal decidió transferirle a la Sedronar un terreno de 15 hectáreas ubicado en San Pedro, donde se almacenaron cargamentos de cocaína antes de ser enviados a Europa.
El caso comenzó con una llamada anónima recibida por la Policía Federal. Así se denunció que dos socios traficaban cocaína a Europa y que la droga se ocultaba en cargamentos de pescado congelado. El denunciante aportó el teléfono celular de uno de los presuntos narcos. Los datos dieron inicio a una investigación que terminó, días atrás, con la condena a prisión de cuatro personas y el decomiso de un campo de 15 hectáreas en San Pedro, que era utilizado para almacenar los estupefacientes.
Si el reciente fallo del Tribunal Oral Federal (TOF) N° 2 de San Martín, integrado por Daniel Cisneros, Daniel Petrone y Héctor Sagretti, queda firme. El campo decomisado, situado a dos kilómetros de la ruta 9 en San Pedro, quedará en poder de la Secretaría de Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) para que su producto sea destinado a combatir el tráfico de drogas.
En el juicio, el Ministerio Público Fiscal estuvo representado por el fiscal federal Alberto Gentili.
Sin antecedentes
“La decisión de decomisar el campo es inédita. La Justicia ha secuestrado vehículos, inmuebles y otras propiedades, pero nunca una chacra. Si la sentencia se convierte en definitiva, la Sedronar podrá vender el campo y usar el dinero para invertirlo en la lucha contra el narcotráfico; o por ejemplo, utilizar las 15 hectáreas para hacer allí un campo de entrenamiento para las fuerzas de seguridad”, explicaron fuentes policiales y judiciales.
En la sentencia del TOF N° 2 de San Martín, cuyos fundamentos se conocieron en los últimos días, se determinó que quien organizaba la banda de narcotraficantes era Gloria Paredes Romero, boliviana, condenada a 12 años de cárcel. “Está harto probado que quien impartía las directivas y atribuía roles a los integrantes de la maniobra era Paredes Romero, sobre la base de una concepción de plan total”, se lee en los fundamentos del fallo, al que tuvo acceso La Nación. Los jueces del Tribunal Oral de San Martín agregaron: “está probado que Paredes Romero era quien tenía la droga almacenada en el campo de San Pedro con el fin último de comercializarla; lo que, de hecho, así se hizo“.
La investigación estuvo a cargo de la Superintendencia de Drogas de la Policía Federal. Cuando los detectives al mando del comisario inspector Néstor Roncaglia hicieron el allanamiento en el campo de San Pedro, secuestraron “65 panes rectangulares compactos envueltos en un material plástico tipo látex de varios colores, los cuales contenían clorhidrato de cocaína”. Cincuenta de los panes estaban almacenados en un galpón. Los otros 15 se ocultaban dentro de un compresor.
Además de Paredes Romero, fueron condenados Pablo Liras, con una pena de ocho años de cárcel; Juan Pedro Contreras, sentenciado a seis años de prisión; y Sergio Paredes Aguilera, quien deberá pasar cuatro años tras las rejas. La información surge de fuentes judiciales.
Conexión internacional
Según se desprende de la reciente sentencia, a la organización liderada por Paredes Romero se le adjudicó el envío de cocaína a Uruguay, España e Italia; los cargamentos que fueron secuestrados. La banda investigada operó desde tiempo incierto hasta el 9 de agosto de 2011, cuando fueron detenidos Paredes Romero y su sobrino, Paredes Aguilera. Según se desprende del fallo, el 26 de abril de 2011 se detuvo en Uruguay a una persona identificada como Mario Cantale, al que las autoridades intervinientes le secuestraron 29,42 kilos de cocaína.
El mismo día de su detención, según consta en el fallo, Cantale se había comunicado con Paredes Romero y “fue ella quien le impartió instrucciones directas respecto del modo y el tiempo de cruce de la frontera, así como del encuentro con otra persona en Uruguay”.
Cuando Cantale fue apresado, Paredes Romero cambió sus líneas de teléfono celular. Cantale era una de las personas nombradas en la denuncia anónima que dio origen a la investigación.
El 23 de julio de 2011 fue detenida en Roma una persona identificada como Mariano Scharer. Había salido de la Argentina en un viaje “controlado”, 12 horas antes. En su equipaje llevaba casi un kilo y medio de cocaína, “en el interior de su maleta, dentro de unos cilindros metálicos de lo que simulaba ser una máquina para la producción de pastas”, según se fundamentó en la causa judicial. El tercer hecho que la Justicia vinculó con la organización de Paredes Romero fue la detención, en España, en julio de 2011, de una persona identificada como Silvio Bargués. Al igual que a Scharer, “se le detectó en su poder material estupefaciente que transportaba oculto en cilindros metálicos -mismo modus operandi que Scharer- de lo que simulaba ser parte de una máquina para la producción de pasta”.
Como quedó dicho, el fallo del tribunal de San Martín no está firme. Aún se espera que en las próximas horas las defensas de los sentenciados presenten sus apelaciones. Pero en una primera instancia, el comercio, el almacenamiento en el campo de San Pedro y el envío de la droga al exterior están comprobados.