La filosofa Diana Cohen Agrest brindó su opinión esta mañana en la 99.9 sobre el tratamiento que el Código Penal le brinda al delincuente y a las víctimas marcando las notables diferencias: “hay una revictimización que la genera el propio estado”. Además, habló sobre el tema drogas: “la mayor cantidad de chicos se muere por paco en las villas y no en una fiesta electrónica”.
El Código Penal de nuestro país sigue marcando día a día las diferencias entre víctimas y victimarios marcando notables distancias entre la asistencias que se le da a uno y otro. La filosofa Diana Cohen Agrest volvió a ser dura en sus conceptos en la 99.9 remarcando la necesidad de cambiar la lógica de la justicia: “el estado actúa por omisión por no proteger a los familiares de las víctimas. La gente no está en el sistema penal y no se entiende que si llegan a saber quien mató a alguien, esa persona tiene todo el sistema penal a su disposición. Tiene un abogado defensor que lo defenderá a raja tabla porque además están muy bien pagos”.
Como contrapartida, en la vereda de enfrente, los familiares de aquellos que sufrieron la pérdida de un ser querido tienen que ingeniárselas para buscar asistencia: “del otro lado, está el hijo de la víctima que no tiene un querellante oficial, sino que tiene que ir a buscar a un abogado para que defienda la muerte de su madre. Hay una revictimización que la genera el propio estado. No queda nada de la igualdad ante la ley, tengo que ir y matar para que la ley me favorezca”.
Para Cohen Agrest, lo que existe es un notable desequilibrio que termina afectando nuevamente a quienes fueron víctimas de la inseguridad y el delito: “hay un desequilibrio que llega a punto tal que el patrocinante oficial tiene todas las de ganar. El argumento que exponen desde el estado es que hay un querellante oficial si la víctima es indigente, no hay igualdad ante la ley. El ordenamiento jurídico corresponde al siglo 18 y la sociedad debe salir a defender sus propios derechos”, advirtió como una actitud que puede cambiar esta manera de pensar.
En medio aparece el debate público por el uso de drogas luego de la muerte de jóvenes en una fiesta electrónica. Al respecto, la filosofa también cargo contra el estado, los políticos y sobre todo el poder judicial. “Cuando se descubre un cargamento de drogas, se descubre a un narcotraficante, pero cuando uno ve un chiquito fumando droga es “cool”. Es el famoso argumento de las pendiente resbaladiza, son drogas de ingreso y de iniciación y se termina en cocaína si uno tiene acceso económico a estas drogas. La mayor cantidad de chicos se muere por paco en las villas y no en una fiesta electrónica”. Al momento de exponer el tema en la televisión también se tiende a ser “livianos” en la opinión y por eso, no se puede solucionar nunca la problemática de fondo: “hay mucha hipocresía en el tema y eso es letal. Es la clase ilustrada del país la que está nutriendo esta idea dejando libre al asesino o hablando de despenalización cuando los chicos mueren como moscas”.
Hace años que viene pensando y diciendo lo mismo, el estado es cómplice de la situación actual y eso debe mejorarse. “El estado hoy es nuestro enemigo en vez de ser nuestro aliado cuando se provoca la muerte de alguien”, finalizó.