La economista de la Universidad CEMA analizó a través de la 99.9 el fenómeno del control de precios que está imponiendo el gobierno nacional.
El control de los precios ha pasado a ser la nueva obsesión buscando posicionar en los comerciantes la responsabilidad de la inflación que tiene el país. La economista de la Universidad CEMA, Diana Mondino brindó su opinión sobre las imágenes que se difundieron este fin de semana de intendentes del Frente de Todos que se mostraron controlando precios directamente en las góndolas.
“Es una forma de demostrar que se hace algo hacia el ciudadano y una forma de preocupar o amenazar al comerciante”, opinó en la 99.9. Luego agregó que “en muchos de los casos, la medida no tiene ningún sentido. Si encontraran un producto fuera de precios máximos, ¿Qué pasaría? ¿Qué sentido tendría? Cuando ese producto se termina a un precio barato, no hay dinero para reponerlo y esa es una situación preocupante”.
A través del tiempo, ha quedado confirmado que el control de precios no es una medida efectiva sino que genera aún más problemas: “la solución de los precios altos siempre es que haya más competencia. Si haces que la empresa que está ahora no le vaya bien, nadie se querrá instalar en un mercado donde al que está, no le va bien. El gobierno está tomando medidas que nos obligan a encerrarnos en lugares donde no hay salida. Si mañana cambia la visión y hubiera un gobierno que piensa lo contrario, no hay recursos para volver a empezar. Si estas empresas tienen problemas dejan de pagar a sus proveedores que son pymes, nada tiene sentido”.
Para Mondino, la clave pasa por no reconocer que algo se está haciendo mal y, por el contrario, se busca un culpable específico fuera del gobierno: “el punto aquí es que se buscan enemigos en vez de reconocer problemas. El gran problema que tenemos es el desempleo. La deuda es un síntoma, la inflación es porque hay que financiar un déficit que tenemos que solucionar para que haya más empleo y no buscar pavadas en otro lado que conducen a más desempleo”.
Por último, la economista habló sobre otro de los temas sensibles que es la toma de deuda y la constante idea de que no hay que pagarle al Fondo Monetario Internacional: “el FMI nos prestó la deuda que en ese momento era la más barata que existía en el mundo y sigue siendo muy barata. Al mismo tiempo el Banco Central se está endeudando al 38% que son las famosas Leliq. Cada vez quedan menos reservas a un precio del dólar congelado. Si se mantiene la política de dejar quieto el dólar, el Banco Central se está endeudando al 38% en dólares y te quejas del Fondo Monetario que te cobra el 4%”.