El presidente del Colegio de Arquitectos habló en la 99.9 sobre la excepción para la construcción en la Reserva Forestal Paseo Costanero Sur y los problemas a futuro que podrían generar.
El hecho de que se haya generado una ordenanza que permite excepciones para la construcción en la Reserva Forestal Paseo Costanero Sur generó preocupación en el Colegio de Arquitectos que emitió un comunicado al respecto.
El presidente del organismo, Arquitecto Diego Domingorena, habló al respecto en la 99.9: “hubo distintos intentos en ese sector. Hay un ordenanza original que estuvo en vigencia hasta junio de 2015 y ahora teníamos información de una nueva propuesta en ese sector. Solicitamos tomar vista del expediente. Hay un concesionario del balneario lindero al arroyo Corrientes que pidió que se ponga en vigencia la ordenanza que caducó en 2015. Además, se generó una ordenanza que eleva los indicadores a un 50%”.
Lo que pretenden es que haya una ordenamiento y previsión y por eso, dejó en claro que no pretenden ir en contra de los emprendimientos privados: “esta serie de normativas, sumadas a otras cuestiones que no se tuvieron en cuenta y evaluamos que deben estar presentes, es lo que nos generó la preocupación. No tenemos animosidad contra los desarrolladores o el crecimiento de la ciudad”.
Todo ese sector tiene una reglamentación para cuidar diferentes aspectos: “hay un plan de manejo de la Reserva que incluye el funcionamiento de una Comisión Técnica. La ordenanza está aprobada pero no se como se va a llevar adelante, si habrá recursos de amparo y demás. Es grave el potencial que genera aprobar esta ordenanza en un sector pequeño de la Reserva, fija una jurisprudencia que podría generar un efecto dominó para que se generen otras construcciones”.
Lo que destacó Domingorena es que pretenden cierta previsibilidad y organización en torno a los desarrollos de la ciudad: “todo lo que hay que hacer en la ciudad es planificación y es lo que nosotros pedimos. Hay que hacer sustentable la ciudad porque tiene un sentido para que todo esté en armonía. En el Bosque Peralta Ramos por la obsesión de conservar algunos árboles que están podridos no se pueden extraer, porque habría que reforestar con árboles nuevos que estén a la escala del hombre porque tenemos aquí árboles de 30 o 40 metros que son un peligro”.