El presidente de la Junta Vecinal de Villa Mascardi habló en la 99.9 por un nuevo fallo de la justicia en el Lago Nahuel Huapi, pero advirtió que todavía siguen los violentos profugados.
La justicia, una vez más dio a conocer un fallo donde se avanza en la devolución de tierras que fueron ocupados por pseudo mapuchistas a través de la violencia. En este caso se trata de territorios cercanos al Lago Nahuel Huapi.
El presidente de la Junta Vecinal de Villa Mascardi, Diego Frutos, habló en la 99.9 y dejó en claro que si bien este tipo de situaciones les lleva cierta tranquilidad todavía no han podido volver a sus casas. “Los vecinos de Villa Mascardi estamos a la espera. Queremos saber quién se hará cargo de toda esta reconstrucción, no solo la nuestra, sino la escuela de guardaparques, todos los complejos de cabañas y nuestras casas privadas. Los famosos weichafes guerreros siguen prófugos. Vemos que no hay un gran interés de capturarlos, porque tendría que ser algo muy sencillo, muy fácil. Nosotros los vecinos de Villa Mascardi hemos dado muchas veces datos concretos y muy pocas veces se nos tuvo en cuenta. Es algo que tenemos pendiente, pero por lo menos vemos que el engranaje judicial se está moviendo en esta era”.
Hoy se está haciendo una tarea desde la Dirección de Parques Nacionales para sacar a todos aquellos que usurparon tierras: “los parques nacionales son de todos los argentinos y no de un grupo de terroristas encapuchados que pretenden adueñarse diciendo que como no es territorio de nadie, ellos pueden hacer uso de ellos. Con el gobierno anterior, en cierta manera se les había facilitado la situación”.
La paz no es algo que puedan tener aún los vecinos de Villa Mascardi porque los grupos mapuchistas violentos siguen en la zona: “cada tanto aparecen porque lo que está protegida es la ruta en sí, que haya circulación, que no haya corte, pero estos hombres se profugaron arriba de la montaña y están merodeando, siguen provocando. Nosotros, como distintivo en la ruta, cada 50 metros hemos puesto nuestras banderas argentinas a lo largo de 3 kilómetros y cada tanto aparecen rotas o quemadas durante la noche. Cada tanto provocan, por lo que no hemos podido volver. No tiene sentido volver mientras toda esta gente siga suelta. Veremos ahora judicialmente si se logra un gran avance, porque no tenemos plena seguridad de poder reinstalarnos en nuestras casas. Esperaremos pacientemente como hacemos desde 2017”.