Disparan tres cohetes hacia la embajada de EE. UU. en Irak sin causar víctimas

Este viernes, tres cohetes fueron disparados hacia la embajada estadounidense en la Zona Verde de Bagdad, sin causar víctimas. Aunque nadie se atribuyó de inmediato la autoría del ataque, Estados Unidos se enfrenta a un contexto de crecientes tensiones regionales vinculadas a la guerra entre Israel y el grupo Hamas en Gaza.

Al menos tres cohetes fueron disparados en la madrugada de este viernes 8 de diciembre contra la embajada estadounidense en Irak, en la llamada Zona Verde de Bagdad, a las afueras de este barrio seguro que alberga instituciones gubernamentales y representaciones diplomáticas, informó un responsable de seguridad iraquí.

Nadie se ha atribuido la responsabilidad del ataque. Se trata del primer informe contra la embajada estadounidense en Bagdad desde que grupos armados pro-Irán comenzaron a lanzar ataques con cohetes o aviones no tripulados a mediados de octubre contra soldados estadounidenses o las fuerzas de la coalición internacional antiyihadista en Irak y la vecina Siria.

Estos ataques ilustran el riesgo de escalada y las repercusiones regionales de la guerra que enfrenta a Israel contra el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza, desde hace dos meses.

Interrogado por la agencia AFP, un responsable militar estadounidense confirmó la activación de las alarmas y “probables ruidos de impactos escuchados” en los alrededores de la embajada estadounidense en Bagdad y de la base Unión III, que alberga a las tropas de la coalición del movimiento antiyihadista internacional en la Zona Verde.

Hablando bajo condición de anonimato, esta fuente dijo que estaba esperando “información oficial sobre la naturaleza del ataque”. “Todavía estamos esperando informes oficiales sobre posibles víctimas y daños a la infraestructura, si los hubiera”, dijo el oficial militar estadounidense.

El viernes, hacia las 04:20 (01:20 GMT), “tres cohetes Katyusha que apuntaban a la embajada estadounidense cayeron cerca de la Zona Verde, cerca del río Tigre que bordea el barrio, explicó a la AFP un responsable de seguridad iraquí, bajo condición de anonimato.

Casi 80 ataques registrados en Irak y Siria
Las facciones armadas pro-Irán justifican sus ataques debido al apoyo de Washington a Israel. Y en represalia, el Pentágono llevó a cabo varios ataques contra combatientes en Irak y también en Siria contra sitios vinculados a Irán.

La mayoría de los ataques fueron reivindicados por la “Resistencia Islámica en Irak”, un grupo formado por afiliados a Hachd al-Chaabi, una coalición de antiguos paramilitares integrados en las fuerzas regulares.

En total, Washington ha registrado al menos 78 ataques perpetrados desde el 17 de octubre contra sus tropas en Irak y Siria, diez días después del inicio de la guerra entre Israel y Hamás.

Washington ha confirmado varios ataques en Irak, el último el 3 de diciembre en la provincia de Kirkuk (norte).

La coalición antiyihadista llevó a cabo un ataque de “autodefensa” contra “cinco combatientes que se disponían a lanzar un dron de ataque”, según un comunicado del mando militar estadounidense en Oriente Medio, Centcom.

Los cinco combatientes murieron y el grupo Al-Noujaba, una facción de Hashd al-Shaabi, publicó sus retratos y organizó funerales el lunes 4 d diciembre en Bagdad.

Un día antes del ataque de Kirkuk, durante una conversación telefónica con el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, el primer ministro iraquí, Mohamed Chia al-Soudani, insistió en “la negativa de Irak a cualquier ataque contra territorio iraquí”.

Mohamed Chia al-Soudani había reiterado “el compromiso del Gobierno iraquí de proteger a los asesores de la coalición internacional presentes en Irak”, en referencia a los soldados estadounidenses desplegados en su país como parte de una coalición antiyihadista encabezada por Washington.