El Jefe de Proyecto del Arsat-1 el ingeniero marplatense Andrés Rodríguez habló en la 99.9 sobre los pasos que deben dar aún para que el satélite esté operable 100%. Además se refirió a su carrera profesional forjada desde la educación pública marplatense y brindó detalles del proyecto Arsat-2.
El ARSAT-1 ya está en el espacio y su lanzamiento ha sido un hecho histórico para el país. El jefe de proyecto, es un marplatense que realizó todos sus estudios en la educación pública: el ingeniero Andrés Rodríguez.
En declaraciones a la 99.9, explicó que “terminé la Facultad en 1995 después de haber recorrido toda la educación pública en Mar del Plata. En ese año me surgió la posibilidad de entrar en lo que iba a ser el primer operador satelital argentino a través de una empresa privada que tenía la concesión para explotar las posiciones orbitales de Argentina con satélites de comunicaciones”.
Su vida tomó un rumbo distinto y como en aquellos tiempos no había manera de ganar experiencia en el país, viajó a Europa. “Ese año, en septiembre entré a trabajar y como no estaba la industria desarrollada, nos entrenamos en Europa. A mí me tocó entrenarme en los equipos y la tecnología de estaciones terrenas para control satelital en Italia”, comentó.
Hoy la situación es distinta porque se han generado nuevas carreras para apoyar la demanda de especialistas en el área: “en los últimos 10 años, en las distintas facultades de Argentina se fueron desarrollando posgrados o carreras de especialización a través de la experiencia de Nahuel-Sat que operó el satélite Nahuel 1 desde 1997 hasta 2007 donde transfiere los activos y la capacidad del satélite, hasta que pasó todo a Arsat. En el 2000, surge la necesidad de tener ingenieros especializados en el área y eso llevó a la creación de las carreras”, explicó Rodríguez.
El máximo proyecto que han tenido hoy es una realidad y se llama Arsat: “en 2007 empezamos con el proceso de desarrollo para la fabricación en Bariloche. Después de 3 años de desarrollo, en 2010 se comienza la fabricación y el 16 de octubre tuvimos el lanzamiento exitoso. Hemos pasado distintas etapas hasta llevar el satélite a la órbita geoestacionaria. Hace unos 15 días que quedó en el lugar donde en el futuro cercano estará en condiciones de dar servicio”, dijo sobre su desarrollo.
Hoy están ultimando detalles para que entre en funciones con normalidad en el espacio: “hace 10 días que estamos terminando con los ensayos de los equipos de comunicación que están a bordo y son los que dan servicios a los usuarios finales. Argentina tiene dos espacios para ocupar con satélites de telecomunicaciones y las pruebas se están haciendo en el segundo lugar que tiene el país porque en la posición donde va a operar hay otro satélite que Arsat hoy está alquilando y da servicios”.
Lo único que resta hacer son algunos estudios y luego posicionarlo en el lugar correcto para empezar con su trabajo: “cuando terminemos con esto, tenemos que hacer un movimiento progresivo que tarda porque el satélite va despacio hasta la posición final donde estará listo para dar servicio sobre fin de este año”, anticipó.
El satélite argentino ayudará para mejorar algunos aspectos y es bueno tener noción de cuáles serán sus alcances: “Arsat-1 proveerá servicios asociados a señales digitales como la de TV, Radios, redes de datos como el caso de las redes de los bancos. También la telefonía pero a través de IP que termina siendo un dato. En lugares donde hay fibra óptica el beneficio no se verá mucho porque es más eficiente, pero para lugares remotos donde es difícil llegar con redes terrestres”.
Para aprovechar las dos posiciones que tiene Argentina, ya se está finalizando también con el proyecto Arsat-2 que será el próximo paso: “para el Arsat-2 falta menos de un año. El satélite está fabricado, se empezaron con los ensayos, se hizo el primero, pero todos estos garantizan que el satélite en vuelo funcione plenamente y resista el lanzamiento”, finalizó.